La calificadora Standard & Poor’s Global Ratings otorgó la calificación mxAA+ al estado de Querétaro en escala nacional con perspectiva estable.
Al respecto, la Secretaría de Planeación y Finanzas del gobierno del estado de Querétaro dijo que se trata de la máxima calificación que emite la compañía para las entidades de este país.
La calificación obtenida, dijo la dependencia estatal, indica que la capacidad de pago del gobierno de Querétaro para cumplir con sus compromisos financieros es muy fuerte en relación con otras entidades federativas.
Además, la perspectiva es estable, por lo que destacó que esto significa que la calificación no cambiará en el mediano plazo, es decir, de seis meses a dos años.
La agencia calificadora fundamentó su opinión con base en el crecimiento económico del estado, así como en su gestión financiera, la cual se llevó de manera eficaz a pesar del impacto de la pandemia por Covid-19, que ocasionó un fuerte choque económico y derivó en riesgos latentes de cierres potenciales.
Standard & Poor’s destacó que el estado de Querétaro mostró ya una recuperación del empleo formal a niveles similares a los registrados antes del inicio de la pandemia, lo cual fue resultado de un modelo de crecimiento exitoso para fomentar la inversión privada y atraer flujos de inversión extranjera directa en diversos sectores.
Esta recuperación más rápida y con un crecimiento más fuerte que el promedio nacional, dice el análisis, de la calificadora, es producto de que se tiene una muy diversificada economía en el estado de Querétaro.
Este crecimiento se espera, dice la agencia, se observara durante los siguientes dos años.
También resaltó las oportunidades que derivaron del tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), mismas que tienen como efecto la estimación de un Producto Interno Bruto (PIB) per cápita de nueve mil 500 dólares, el cual es superior a la media nacional que es de ocho mil 300 dólares.
Tras las elecciones de junio pasado, la compañía prevé una transición política fluida y una amplia continuidad en las políticas financieras cautelosas, las cuales se vieron reflejadas en el pago de la deuda pública, el mantenimiento de una liquidez alta y la reducción de la deuda con proveedores.
En dichos logros destaca la labor del equipo técnico de la administración actual, que cerrará con un historial establecido de prudencia fiscal.
También, la administración 2015-2021, que concluye su periodo el próximo 30 de este mes, terminará sin deuda pública.