El Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC, por sus siglas en inglés) otorgó a Querétaro el Sello de Seguridad Global que avala las prácticas sanitarias y los protocolos aplicados a los diversos subsectores del turismo.

Este reconocimiento certifica al gobierno y a los prestadores de servicios en el cumplimiento total de protocolos establecidos con motivo de la pandemia por Covid-19 y acredita a la entidad como un destino seguro para el turismo nacional e internacional.

El gobernador del estado, Francisco Domínguez, señaló que este sello garantiza que es seguro viajar a la entidad.
 “Mi reconocimiento a todos los integrantes del sector turístico de nuestro estado por esta distinción, fruto de su organización y compromiso. Viajar por Querétaro es viajar seguro”, sostuvo el mandatario estatal.

Los lineamientos establecidos por el Consejo Mundial de Viajes y Turismo están diseñados bajo los estándares emitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), con el respaldo de la Organización Mundial de Turismo (OMS).

Al dar a conocer la distinción para Querétaro, la presidenta del WTTC, Gloria Guevara Manzo, destacó la importancia de actuar en todo momento con la mayor responsabilidad ante la emergencia sanitaria que se vive en todo el mundo.

Dijo que para el WTTC es momento de sumar esfuerzos entre autoridades gubernamentales y representantes del sector privado, para hacer un frente común que permita impulsar el turismo en la nueva normalidad, pues se trata de una actividad que es un importante motor de la economía nacional.

El sello permite a los viajeros internacionales identificar a los gobiernos y a las empresas que han adoptado protocolos estandarizados globales de salud e higiene para experimentar viajes seguros.

Querétaro se une a la lista de prestigiados destinos alrededor del mundo que cuentan con este sello en países como Costa Rica, Jamaica, Brasil, Canadá, España y Rusia, entre otros.

Por ahora el sector de servicios turísticos mantiene una operación de apenas un 30% de su potencial, lo que significa que no todos los atractivos operan.

En el caso de los hoteles solo tienen permitido operar a un 30% de su capacidad, mientras que en caso de atracciones como el servicio de tranvías turísticos las unidades viajan a 50% de su capacidad, regulando los criterios para ingresar a las unidades.

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