Inspirada en México, en la fuerza de su tierra y el corazón del pueblo, Lilia Vázquez Kuntze creó Tierra de fuego, obra que tendrá su estreno mundial el 3 de mayo en el Teatro de la República, en el primer concierto de Ludwig Carrasco como director titular de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ).
La compositora platicó a EL UNIVERSAL Querétaro que Tierra de fuego fue escrita en 2002 y a raíz de la invitación de Carrasco, se hizo una revisión y realizaron varios cambios, aunque mantiene la misma idea con que se originó: mostrar a México como un pueblo de fuego, lleno de energía y fuerza.
“Este es un país de fuego, alegre siempre y la pieza surge del deseo de plasmar musicalmente lo que para mí representa la esencia de México, con su gran herencia cultural recibida de las civilizaciones mesoamericanas, la fuerza de su tierra y el corazón de fuego de su pueblo, que siempre se expresa a través de la música. La inspiración es México, aunque obviamente son mis sentimientos y emociones”, explica la compositora.
La pieza es de un sólo movimiento con tres secciones, la primera habla sobre avanzar, superar los obstáculos; la segunda parte es dramática, alude al dolor y vulnerabilidad; y la tercera parte retoma el impulso de la búsqueda de identidad y libertad.
Al preguntarle a Vázquez Kuntze, si su obra representa un aliento de esperanza ante un país que convulsiona, respondió: “Sí, desde hace unos años para acá mi intención es plasmar en la música, las emociones, los sentimientos más rescatables de la humanidad y enfocarnos a lo que todavía tenemos: una visión de fuerza, positivismo de lucha, de salir adelante, de salir de esos hoyos negros que todos tenemos y que es parte del dolor que viene desde la infancia, que cuando son tan fuertes la mayoría de los seres adultos tendemos a ocultar porque duelen demasiado, creo que sería muy importante retomar la parte sensible del corazón humano, para salir adelante con fe y con fuerza”.
Para Lilia la composición de Tierra de fuego representa “muchos caminos por los cuales hay que transitar para finalmente encontrar una solución”. Su obra abarca trabajo orquestal, coral, música de cámara y orquesta de cuerdas, en su labor como compositora ha tenido varias transiciones, principalmente en su lenguaje.
“De varios años para acá he querido hacer una música más empática tanto con los intérpretes como con el público y desde esta parte ha cambiado mi lenguaje, mi música empieza a ser más solicitada por los intérpretes que sería el primer paso para después llegar al público. Es una cuestión muy importante el querer ser sensibles o empáticos porque finalmente eso es lo que hará que la música se escuche”, agrega.
Durante siete años Lilia vivió en Europa, donde realizó sus estudios de composición, actualmente radica en Toluca y el próximo 3 de mayo estará en Querétaro, para ser testigo del estreno de su obra en el emblemático Teatro de la República.