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“Beatriz Bazán mediocrizó el legado de José Luis Cuevas y tenemos que recuperar al gran artista que fue”, dijo ayer por la mañana en entrevista telefónica Ximena Cuevas, una de las tres hijas del artista.
Ximena y sus hermanas María José y Mariana no fueron informadas por la segunda esposa del artista, Beatriz Bazán, que su padre había sido hospitalizado y que había fallecido. Fue a través de Twitter y por amigos que supieron del deceso del artista.
Entre lágrimas, Ximena recuerda la obsesión del pintor con la muerte: “Me atormenta mucho pensar cómo se fue, mucho; como la canción de Liliana Felipe... ¿cómo fue?, ¿le dio miedo?, ¿se fue rápido?, ¿alguien le dio la mano? Me atormenta mucho que en la obra de mi papá, sus escritos siempre tenían una obsesión y miedo a la muerte, eso fueron sus autorretratos obsesivos, el paso del tiempo, la muerte que se acerca. Hace cuatro años, en el hospital, al tomar su mano, me decía: ‘Tengo tanto miedo...’ y nunca sabré sus últimas horas, si le dolió, si le dio miedo...”
La artista dijo que el propósito de ella y sus hermanas será rescatar el nombre artístico, el legado, la trascendencia de José Luis Cuevas. Con María José realizará un documental sobre su historia personal y artística, con base en su escritura y su obra.
“Soy una orgullosísima hija de uno de los seres más maravillosos que ha dado este país. Mi papá se merece Bellas Artes, que lo recuerden las instituciones como el gran artista que fue, que hizo un arte maravilloso. Haremos un documental para que la gente recuerde el que fue, un animal fantástico fuera de este mundo, bello físicamente y bello como persona, la persona que más he amado”.
Ximena dijo que lamentablemente, durante estos años la obra de su padre se devaluó y cuestionó que las instituciones lo olvidaron tras la polémica que se dio con su segunda esposa. “Las instituciones tristemente se quedaron con la historia familiar... y eso es rebajarlo”. Agregó que en los últimos años el artista fue mermado y que otro de los hechos más lamentables es la situación y olvido del mismo en su propio museo, que “nunca contesta”. Recordó que Cuevas antes de su relación con Bazán era una figura importante del arte internacional.