En la India, 36 mil 735 mujeres fueron violadas en 2014. El gobierno de ese país hizo sus cuentas: una mujer es violada cada 15 minutos.
En nuestro país, según el reporte “México. Desafíos para un Desarrollo Incluyente” de la ONU-México,  en 2013 se registró  un promedio de siete feminicidios al día, es decir, se cometieron 2 mil 502 feminicidios ese año.

Estos son sólo dos ejemplos de un problema global que debe ser denunciado, asegura el fotógrafo indio Sujatro Ghosh, de  23 años, quien comenzó a fotografiar a mujeres con máscaras de vaca en distintos lugares públicos para criticar, a través del arte, que en la India una vaca valga más que una mujer.

“Enfrentar a los abusadores cuerpo a cuerpo nunca será una opción, porque las agresiones son en grupo y una sola persona no puede defenderse, así que pensé que si iba a protestar contra todo esto tendría que ser mediante el arte”, comenta el artista.

El fotógrafo, nacido y criado en Calcuta, asegura que el abuso contra las mujeres es un problema global que necesita ser visibilizado para poder comenzar a erradicarlo.

Ghosh se encontraba en Nueva York la última semana de mayo cuando todo tomó forma en su mente. Compró una máscara de vaca en una tienda de Manhattan y voló de regreso a la India. Una semana después estaba fotografiando a amigas y conocidas utilizando la máscara.

Era un “statement” para la sociedad india: mientras que los grupos más conservadores mantienen la protección hacia un animal sagrado, miran hacia otro lado cuando ocurre una violación colectiva o un feminicidio.

—¿Haces esto para hacer un país y un mundo más seguro para las niñas y las mujeres?

—Absolutamente—, responde en entrevista en videoconferencia.

En México quizá no se tiene un animal que reciba mayor protección que las mujeres, pero los problemas de violencia de género no son tan diferentes a los que se enfrentan en la India.

El estudio “Las otras víctimas invisibles”, de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), revela que  90% de las víctimas de violencia sexual en el país son mujeres y 60% de las violaciones son cometidas por conocidos o familiares de las víctimas.

“Si tú ves todo el escenario no es sólo un problema en mi país. Sí, la veneración a las vacas ocurre sólo en India, pero mi meta es (visibilizar) los derechos de las mujeres y su protección y ese es un problema mundial que estoy tratando de destacar.

“Todos sabemos dentro de nosotros que es un problema presente en todas las sociedades. Mi proyecto se centra en la India, por eso usamos las máscaras, pero estoy listo para llevarlo a todo el mundo. Porque es un problema que necesita solución. Y sí, suena ambicioso, pero al menos este proyecto crea, de alguna forma, conciencia y educación sobre él.”

El artista desea que su ejercicio se convierta en una protesta global y por ello ha iniciado un proyecto de crowdfunding (financiación de masas) para viajar a través de la India fotografiando en diferentes lugares.

En sus redes sociales sólo hay nueve fotografías de las 20 que ha tomado. En todas ellas, una mujer aparece usando una máscara de vaca, ya sea en lugares públicos o en la intimidad.
 La protesta va más allá: no sólo usan una máscara, también toman actitudes que son interpretadas como “masculinas” por la sociedad india.

“La industria de la fotografía está dominada por hombres, y sin decir un país específico, ellos (en general) no esperan ver eso en una fotografía, así es como funciona si lo piensas y ese es el estereotipo que estoy tratando de romper”, explica.

Ghosh reconoce que todos tenemos influencias femeninas en nuestra vidas  y reconoce que al tener una crianza sin prejuicios ni restricciones en una de las zonas más liberales de la India (Calcuta),  tardó un poco en darse cuenta del problema, sin embargo, al crecer supo que la violencia hacia la mujer era una práctica difundida en su país.

“Uno pasa esperando que alguien más se levante por una causa y con los años entendí que si alguien iba a comenzarlo tenía que ser yo”, afirma. Y allí comenzó su primera protesta: declararse feminista públicamente en un país donde las penas por matar a una vaca van de tres años de cárcel a cadena perpetua —dependiendo de la región— y al mismo tiempo registra unos mil ataques con ácido a mujeres anualmente, de acuerdo con las estimaciones de Human Rights Law Network (una ONG india).

“He declarado públicamente que soy feminista porque es una forma de manifestarte por una causa en la que crees, y eso es necesario, especialmente en un país donde parecen no entenderlo y esa es la razón por la que me declaro feminista públicamente. Y tal vez alguien lo vea como superficial pero no lo es. Más bien es alarmante que tengas que hacerlo por el problema que existe”, asegura.

En México, un estudio financiado por la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) reveló que entre 2010 y 2015 se registraron casi 3 millones de casos de violencia sexual, que equivale a 600 mil casos por año y a mil 345 casos por día.

Apenas el domingo 2 de julio, una mujer de 35 años, que fue violada colectivamente y atacada con ácido en varias ocasiones por los mismos 
violadores, tuvo que ser hospitaliza porque sus agresores llegaron al hostal para mujeres en Lucknow, capital del estado de Uttar Pradesh, donde era mantenida en custodia policial junto a sus hijos, porque fue rociada con ácido por quinta vez.

Con este panorama ante sus ojos,  Sujatro Ghosh comenzó a aprovechar las redes sociales y publicar en Instagram sus fotografías.

“Nunca pensé que se conocería en todo el mundo, nunca pretendí ser ese tipo de persona. Mi intención era muy clara, era hacer públicos los valores en los que creo. Defender los derechos de las mujeres y su protección, primero en mi país, y luego en el mundo”.

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