El Chuky está desesperado, la presión de sus múltiples deudas lo está volviendo loco, por eso secuestró al Licenciado, conocido por sus generosas propinas a la guapa mesera del mismo bar donde el Chucky hace la limpieza, después de cumplir con sus largas jornadas descargando camiones.
Es la primera vez que el Chucky secuestra a alguien, es tan notorio que hasta le pide a su víctima ayuda para negociar su regreso a casa.
Y en el hueco de alcantarilla, donde el novato secuestrador mantiene al Licenciado —quien resultó ser un diputado, por cierto de los más faltistas—, discuten sobre las leyes y la política que rige al país, este país en el que un diputado gana a manos llenas cuando hay gente que no tiene ni para comer.
Con las actuaciones de Manuel Gómez Becerril, Manuel Puente, Berenice Acosta y Rafael Ramírez se realizó la función número 100 de El Diputado, obra de Edeberto Pilo Galindo, con la dirección de Uriel Bravo y la producción de Avatares Compañía Teatral y Escénica Pulque y Peyote.
La develación de la placa conmemorativa a las 100 representaciones se realizó en el foro del Museo de la Ciudad con la presencia de Paulina Aguado Romero, titular de la Secretaría de Cultura del Estado de Querétaro, y Alejandro Anguiano, director de foros, teatros y galerías del Instituto de Cultura del Municipio; el gran ausente fue Pilo Galindo.
“Esperábamos contar con la presencia del maestro Pilo Galindo, que casi, casi estaba en el avión, pero cuando se dio cuenta no había pagado el boleto, y se tuvo que regresar; lamentablemente no pudimos solventarle su boleto y tampoco el gobierno de Chihuahua en esta ocasión pudo ayudarnos, porque él vive en Ciudad Juárez; ven el contexto de la obra, complicada, difícil, es el contexto de todo el país, ya no nada más de Ciudad Juárez”, dijo Uriel Bravo.
“Esta obra está pensada para todos nosotros, no nada más en cuestión de reflexión a los políticos sino también a nosotros como ciudadanos”, afirmó Manuel Gómez Becerril actor y productor del montaje, quien realizó una dinámica para invitar a una persona del público a ser parte de los invitados de develar la placa, y fue Pamela Jiménez, docente de teatro en la Universidad Autónoma de Querétaro y maestra de varios de los participantes de El Diputado.
“El teatro, siempre lo he dicho, no es de velocidad es una carrera de resistencia, es una carrera que nos remite a un trabajo colectivo, el respeto al trabajo colectivo, al estar aquí muchas horas de ensayo, entendiendo las distintas dinámicas que tiene cada quien para entregar cada noche lo mejor de uno”, expresó Pamela Jiménez.
