A un año de la muerte de Luis Alberto Arellano, sus amigos, alumnos y familiares mantienen vivo su recuerdo. El hombre de gesto recio, voz fuerte y acciones algunas veces arrebatadas, queda en segundo plano ante tantas historias que revelan a un Luis Alberto generoso y divertido, un gran amigo, un escritor ejemplar.
Ahora lo que sigue, dijo el también poeta Arturo Santana, es el análisis de su obra. Y parte de esa labor corresponde al Seminario de Creación Literaria, fundado por el mismo Luis Alberto Arellano, y que a la fecha continúa en actividad con la coordinación de Oliver Herring.
“Menuda tarea nos dejó. El análisis de su obra poética, el análisis de sus ensayos, la valoración de su trabajo literario, ese ¿quién lo va a hacer? Oliver, ¿dónde estás? ¡No le saques! Nos toca a nosotros los que escribimos”, sentenció Arturo Santana, también maestro del Seminario de Creación Literaria.
“En Querétaro somos muy ingratos, publicamos un libro, y hay un comentario por ahí, dos o tres renglones apretujados y ya se acabó, no hay reseña, le debemos a nuestra cultura local la reseña literaria. ¿No hay quién sepa escribir reseñas? Organizaré un taller, en lugar de poesía, un taller de reseñas literaria”, añadió.
Nómina de huesos, cuaderno de poesía de Luis Alberto Arellano, es clave para el análisis literario de su obra, afirmó Santana. “A mí me gusta mucho Nómina de huesos, no sólo porque es su primer poemario, sino porque está el embrión, el génesis de su obra y si se fijan bien en la obra sucesiva a Nómina de huesos, hay pistas y señales de lo que se propuso como autor escribir, y no le dijo a nadie”.
Santana se comprometió a analizar y escribir la obra de Luis Alberto, pero también dejó como tarea al Seminario y los que formaron parte del mismo, a estudiar la obra de Arellano y comenzar a hacer crítica del trabajo literario que se genera en la entidad.
Organizado por el Seminario de Creación Literaria, el evento Honor a quien honor merece se realizó en Galería Libertad el pasado 15 de diciembre, justo el día en que se cumplió un año del fallecimiento del poeta, ensayista y traductor.
En el homenaje se dio lectura a la obra de Grandes atletas negros, después se abrió el micrófono a los asistentes. En el evento estuvieron presentes los jóvenes escritores Horacio Warpola, Imanol Martínez, Jaime He, Fernando Jiménez, Coatl Sandoval, Monserrat Acuña, Anaclara Muro, Tadeus Argüello y Rafael Volta, entre otros.
“No sé realmente qué significa Luis Alberto Arellano, pero es una persona que se quedó grabado en muchas (…) Es una persona que me impactó como amigo. Creo que también está la celebración, que reconozcamos a la persona que ha convertido dentro de nosotros lo que significa la literatura aquí en Querétaro”, manifestó Fernando Jiménez.
Oliver Herring, coordinador del Seminario de Creación Literaria y amigo de Luis Alberto, agradeció la participación del público presente e invitó a estar pendiente de las actividades que para el 2018 está preparando el Seminario, continuar con el trabajo que en su momento inició Arellano, es también una forma de rendirle homenaje, detalló Herring.
