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Con el estreno de Tierra de fuego, obra que por años permaneció guardada, Ludwig Carrasco celebrará su primer concierto como director titular de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ). En entrevista con EL UNIVERSAL Querétaro, el experimentado director de orquesta dijo que este primer recital, programado para el 3 de mayo en el Teatro de la República, es una declaración de intenciones, un adelanto del trabajo que realizará al frente de la agrupación.
En su trayectoria de violinista y director, Carrasco ha estrenado más de 100 obras, y uno de sus objetivos principales como líder de la OFEQ es dar a conocer el trabajo de compositores mexicanos, hombres y mujeres.
“Una parte de la identidad que queremos formar con la orquesta, es impulsar la música de los compositores mexicanos y compositoras; de la maestra Lilia Vázquez (catedrática de la UNAM) vamos a estrenar su obra Tierra de fuego, ya me ha entregado la partitura final, y es muy emocionante presentarle al público de Querétaro una obra de estreno, algo que nunca se ha escuchado en ninguna otra parte”, expresó.
Tierra de fuego es una composición que había quedado en el cajón por varios años y a raíz de la solicitud de Carrasco, finalmente será estrenada. El caso de esta obra es similar a lo que está sufriendo el trabajo de otros compositores mexicanos contemporáneos y creadores que han fallecido, pero su obra jamás se ha presentado.
“Tenemos en México un grandísimo patrimonio musical y no quiero que suene como nacionalismo exacerbado, pero únicamente con ver los catálogos de los compositores podemos notar que hay obras para hacer no sólo una temporada sino temporadas completas de años, y realmente sería una pena que sólo se conozcan un puñado de ellas (…) Podríamos programar una obra en cada concierto y durar unos cinco o seis años sin repetir repertorio; en la orquesta queremos apostar por los creadores nacionales, rescatar obras que se han quedado de lado de la programación, redescubrir y dar voz a quien ha quedado silenciado por varios años”, explicó.
Además de la pieza de Vázquez, en el concierto del 3 de mayo se escuchará Ah! Perfido, de Ludwig van Beethoven, con la participación de la solista Lourdes Ambriz; el programa se completa con Sinfonía no. 9, de Dmitri Shostakóvich, “una obra que hace tiempo no se escucha en Querétaro y es un pilar del repertorio sinfónico”.
Incentivando a nuevas generaciones. Vía telefónica desde Chicago, donde está finalizando sus estudios de doctorado, Carrasco también habló del Primer Concurso Nacional de Solistas de Repertorio Mexicano, proyecto que se realiza por primera vez a nivel nacional y que lanzó a través de la OFEQ, con el fin de valorizar el patrimonio musical del país e incentivar el desarrollo de nuevas generaciones de artistas.
“Una carencia que he detectado en el medio musical mexicano, es la falta de oportunidades para las nuevas generaciones de solistas y por otra parte, la poca integración que hay de la creación nacional en las programaciones y en los planes de estudio, (…) lo que queremos es motivar a las nuevas generaciones para que descubran este repertorio, que lo estudien y difundan”, detalló.
La edad máxima para participar es de 30 años cumplidos al 15 de septiembre de 2018. El candidato deberá concursar con una obra concertante original para su instrumento/voz y orquesta escrita por un compositor mexicano (de nacimiento o naturalizado) sin importar la estética o periodo musical, se lee en la convocatoria disponible a través de la página www.filarmonicadequeretaro.org En la misma página está disponible la convocatoria para audiciones de plazas vacantes que tiene la orquesta.
En junio, Ludwig Carrasco estará radicando definitivamente en Querétaro para dirigir a la Orquesta Filarmónica de Querétaro y guiar los proyectos de los que habló desde su nombramiento. Uno de los pendientes por resolver, comentó, es un sitio definitivo para la orquesta, que permita al público identificarlo con sede de la agrupación y que también ayude a crecer artísticamente a la OFEQ; otro de los intereses a largo plazo, es incrementar el presupuesto para ofrecer mejores prestaciones a los músicos, además de crear proyectos que den proyección a nivel nacional e internacional.