No se consideraba un fotógrafo, pero Manuel de la Llata conservó un acervo que reúne más de cuatro mil originales, piezas de placas de vidrio hasta Polaroid, y el Centro Queretano de la Imagen se encuentra trabajando en la digitalización del material, además presenta la exposición Manuel de la Llata, testigo de dos siglos.
Don Manuel María Salvador de la Llata Barceló y Villagrán nació en la ciudad de Querétaro el 26 de marzo de 1891 y murió el 24 de julio de 1994, a los 103 años de edad.
“Fue un queretano que no se dejó atrapar por su clase social, nació en pañales de seda, con sangre azul e hizo de su vida un trayecto de continuo cambio de ajustarse a lo que la vida le daba. Es un placer trabajar en este acervo, gracias a la generosidad de su sobrino nieto Ramiro Valencia, estoy muy complacida que una obra tan importante no se haya perdido”, dijo Guadalupe Zarate, directora del Centro Queretano de la Imagen.
Además de su gusto por la fotografía, fue poeta, vendedor de artesanía, corredor de autos de carreras, inspector honorario de monumentos de la República, tuvo la oportunidad de visitar gran parte del país, siempre acompañado por una cámara.
“El archivo Manuel de la Llata lo consideramos desde 1874 —porque tenemos unas tarjetas de visita, obviamente no las hizo él, pero las conservó— hasta 1994, es una temporalidad de 120 años y yo calculo que son unos 4 mil 200 originales (…) Quizá no es una persona tan relevante, yo creo que es una persona común que le gustaba hacer de todo, y tuvo facilidad de hacer muchísima fotografía del país porque estuvo trabajando como vendedor de artesanías, fue poeta, corredor de carros de carreras, inspector honorarios de monumentos de la República, estuvo al frente de la dirección de la hemeroteca en Palacio Nacional; gracias a él Querétaro vuelve a tener el nombre de Santiago de Querétaro y en gran parte a él Jardín Obregón recupera el nombre de Jardín Zenea”, platicó el también fotógrafo Ramiro Valencia.
Manuel de la Llata, Testigo de dos siglos se exhibirá en el Centro Queretano de la Imagen hasta mediados de noviembre; la exposición cuenta con piezas originales, obras que fueron premiadas en concursos de fotografía, imágenes familiares y de varios sitios donde estuvo el fotógrafo queretano con su cámara.
