De los misterios que envuelven la existencia de los vampiros, esos seres condenados a la oscuridad y a buscar cada noche a una nueva presa para saciar su sed, se creó Bloodsucker, puesta en escena donde también se revela la sensibilidad, el gesto seductor y amoroso que hay en el pálido rostro de estos personajes míticos y fascinantes.
Inspirada en la película Nosferatu, Bloodsucker es una coreografía luminosa creada por Lea Anderson, y es la primera pieza de Genius, espectáculo que presentó Anjali Dance Company para inaugurar la cuarta edición de Oxímoron, Festival Internacional de Arte y Cultura desde la Discapacidad, que organiza Buró Cultural.
La segunda pieza de Genius es Beethoven, coreografía de Gary Clarke que rememora la historia del músico alemán, desde la infancia hasta el momento en que la sordera inunda su cabeza, y en ese mundo de extraño silencio y amores perdidos, muere el gran genio.
Hannah Dempsey, Daisy Garrett, Alex Hyde, Jason Manito, Nick MacKerrow y Lauren Payne —bailarines de Anjali con Síndrome de Down— sorprendieron al público queretano, quien no vio en ningún momento eso que han catalogado como “discapacidad”, porque lo más evidente fue el talento, su dominio del espacio escénico, experiencia que les ha traído la disciplina del arte, y por todo eso Genius se llevó los aplausos más sinceros.
En la ceremonia de inauguración estuvieron presentes Kevin Mackenzie, director general del British Council México; Beatriz Marmolejo, de la Secretaría de Desarrollo Humano y Social del Municipio de Querétaro; y Rafael Mata, en representación de la Secretaría de Cultura de Querétaro.
“En el Reino Unido hemos realizado muchos esfuerzos para reconocer el talento, la calidad y la originalidad de las creaciones artísticas realizadas por artistas que presentan algún tipo de discapacidad, su manera única de ver y entender el mundo, de traducir al lenguaje del arte sus emociones y sus experiencias nos recuerdan que se puede producir arte de gran calidad desde y no a pesar de la discapacidad”, dijo Kevin Mackenzie.
“Hay una sensibilidad, un capital creativo muy importante en esta llamada discapacidad, y es la razón de hacer este festival, con el tiempo nos dimos cuenta que es uno de los primeros en toda Latinoamérica y nos sentimos muy contentos de arribar a esta cuarta edición”, comentó Miguel Ángel Herrera Oceguera, director de Buró Cultural y Festival Oxímoron.
Como parte de su edición 2017, el festival tiene programadas convivencia, sesión fotográfica, presentación de los resultados del taller de danza inclusiva, así como la proyección de documentales sobre arte y discapacidad.