Paseo de la Reforma es una de las principales vialidades de la Ciudad de México. El primer trazo fue realizado por orden del emperador Maximiliano y actualmente tiene una longitud de 14.7 kilómetros que atraviesan diferentes alcaldías.
Además de la longitud, Paseo de la Reforma se caracteriza porque entre el Eje 2 Norte (colonia Ex Hipódromo de Peralvillo, en la Gustavo A. Madero) y el Eje 2 Poniente (colonia Juárez, en Cuauhtémoc) tiene un conjunto escultórico de personajes históricos realizados en bronce, y jarrones del mismo metal. Todas esas obras se encuentran sobre una base de cantera, roca con la que también se hicieron bancas. En la avenida hay seis glorietas, algunas con monumentos de valor histórico y artístico.
Las marchas en la Ciudad de México por lo general parten del Ángel de la Independencia y llegan al Zócalo; como parte de esas manifestaciones varias esculturas han sufrido daños como pintas con aerosol, colocación de calcomanías o grafitis.
En un recorrido por Paseo de la Reforma, EL UNIVERSAL constató el daño sobre las más de 130 bases de las esculturas y las bancas; tienen marcas relacionadas con movimientos y causas como el del 2 de octubre, los 43 normalistas de Ayotzinapa, el símbolo del anarquismo (letra “A” encerrada en un círculo), violencia de género, y también hay grafitis que al parecer no tienen relación con movimientos sociales.
Uno de los daños más graves en un monumento sobre Reforma ocurrió el viernes 16 de agosto, cuando un grupo de personas que se manifestaron contra la violencia hacia la mujer, hizo pintas en la Columna de la Independencia.
“México feminicida”, “México es un país feminicida”, “La patria es asesina”, “Estado feminicida, patrimonio nacional” y “Cerdos violadores”, son algunas de las consignas escritas sobre la obra, catalogada como Monumento Artístico por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura(INBAL).
Tras las pintas, el 21 de agosto surgió la iniciativa Restauradoras con Glitter. En redes sociales difundieron un comunicado dirigido al Presidente y a la jefa de Gobierno.
El movimiento Restauradoras con Glitter, explica Janeen Contreras, una de las voceras, surgió ante las respuestas por las pintas: “Para nosotras, el patrimonio no son materiales exclusivamente, sino la relación que mantiene la sociedad con estos monumentos. Nuestro principal objetivo es la procuración de seguridad hacia las mujeres mexicanas, pues se habla de un supuesto vandalismo (en la Columna de la Independencia) pero se les olvida el motivo de las pintas, que son la violencia, la inseguridad y la impunidad contra las mujeres”.
El primer comunicado fue firmado por alrededor de 180 mujeres, entre restauradoras, museólogas, historiadoras y artistas. Hoy el movimiento está integrado por cerca de 400 especialistas.
Janeen Contreras, restauradora por la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía (ENCRyM) y quien dirigió el proyecto de la restauración de “El Caballito”, añade que otro de sus objetivos es la documentación de las pintas en la Columna de la Independencia, antes de que se limpien. Proponen que la documentación sea a través de fotografías, video o fotogrametría, pero esto dependerá de si las autoridades les dan acceso pues el monumento fue bloqueado con un cerco de madera.
Contreras enfatiza en que no buscan promover las pintas sobre monumentos y que incluso, en caso de que las autoridades no atiendan sus peticiones, escribirán otro documento y no realizarán un llamado a pintar monumentos. En un inicio el comunicado estaba acompañado de una lista de mujeres que apoyan la iniciativa Restauradoras con Glitter; pero eliminaron ese listado por los comentarios que recibieron.
“Hubo preocupación al interior del colectivo y por razones de seguridad decidimos retirar los nombres, pero este factor es una evidencia del grado de la violencia contra la mujer. La jefa de Gobierno nos recibirá el 28 de agosto y a ella sí le entregaremos las firmas. Por el momento Restauradoras con Glitter sólo está conformado por mujeres, después discutiremos si incluiremos a hombres, (pese a que no están en la lista de firmantes) ellos sí nos han mostrado apoyo”, comenta la restauradora.
La división. El gremio de restauradores coincide en la libre expresión; sin embargo, tras las pintas sobre la Columna de la Independencia, difieren en el tiempo para comenzar el procedimiento de limpieza.
En una entrevista previa a la manifestación de la violencia contra la mujer, la restauradora Mariana Grediaga habló sobre la importancia de cuidar el patrimonio: “Soy una persona que sí está de acuerdo con la libertad de expresión pero también creo que hay un desconocimiento al crear estas pintas en monumentos históricos porque en realidad son patrimonio de todos, incluso de quien los grafitea. Debiera de haber mayor conciencia, está bien manifestarse pero sin afectar tu propia casa, que son tus monumentos”.
Si bien Janeen Contreras coincide en que no se deben hacer pintas sobre monumentos, considera que no habría problema en primero documentar las pintas y luego comenzar los trabajos: “Las pinturas tienen disolventes que se evaporan con rapidez. En cuestión de minutos los disolventes están secos al tacto y en cuestión de horas están completamente evaporados. Lo que iba a penetrar (de la pintura) ya penetró. No veo por qué la preocupación del tiempo, obviamente no esperamos que se tarden años, pero no aumenta mucho más el rango de penetración”.
Sin embargo, Gabriel Mérigo, especialista en restauración de monumentos, dice: “Entre más rápido se atienda la limpieza de un grafiti será mejor el resultado, pero aquí (en la Columna de la Independencia) es una situación política que hay que tomar con mucho cuidado”.
Gabriel Mérigo encabeza actualmente el proyecto de mantenimiento sobre el conjunto escultórico de Paseo de la Reforma que inició la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México.
Efraín Morales, director de Servicios Urbanos y Sustentabilidad de esta Secretaría de Obras, explica que serán intervenidas los más de 130 basamentos escultóricos, así como las esculturas y los 284 metros lineales de banca de cantera: “Es un proceso que viene desde comienzos del año. Primero se hizo un diagnóstico de las esculturas, para analizar qué tipo de piedra tienen los basamentos, qué tipo de afectación tienen y cómo se procedería. Presentamos el estudio al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para que autorizara los trabajos y comenzamos la limpia hace un mes. Todos los daños que tienen las esculturas son reversibles, aunque detectamos algunos casos que requieren mayor atención por el tipo de material”, dice Morales.
El mantenimiento a las esculturas de Reforma, de acuerdo con el funcionario, es un proyecto que prevén concluir en agosto de 2020; hoy está en la primera de tres etapas.
Efraín Morales detalla que los tra bajos de limpieza tendrán un costo de 25 millones de pesos, pero enfatiza que los trabajos estarán centrados en el mantenimiento y que no contemplan la realización de réplicas sobre las piezas faltantes.
Sobre Reforma debieran estar 77 esculturas; sin embargo, ya no se encuentran las de Rafael Lucio, Eustaquio Buelna, Jacinto Pat, Gregorio Torres, Manuel Álvarez Zamora, Antonio Carbajal y Manuel Payno. También faltan varios jarrones.
Gabriel Mérigo comenta que para los trabajos de mantenimiento de las esculturas tuvieron que desarrollar más de 30 variedades de soluciones, pues las pintas fueron realizadas con diferentes colores y con distintos materiales, como aerosol, plumón, pintura vinílica, e incluso calcomanías.
“Este problema se ha tratado de resolver de manera inadecuada, han tapado los grafitis con cemento, que lo único que provoca es más daño. Las planchas de cemento se ve que las pusieron para tapar el grafiti. Esto implica más trabajo, pues primero se tiene que limpiar el grafiti, luego retirar la capa de cemento y continuar con el grafiti inferior”, explica.
El restaurador comenta que no tienen registro de cuándo ni quién realizó las capas de cemento; dice que pese al deterioro, el daño será reversible, aunque en algunos casos quedarán ciertos “halos” que no habrá manera de retirar pero serán solucionados con aplicación de pátinas.
El especialista reconoce que la limpia de los colores negro y rojo representan un mayor trabajo. Añade que descartan la aplicación de “capas de sacrificio” —recubrimientos sobre la roca original—, porque a veces estos reducen la capacidad de respiración a la piedra.
Gabriel Mérigo también comenta que aún está por definirse si trabajarán sobre los monumentos que están en las glorietas de Paseo de la Reforma. Con información de Gisela Castillo Peña.