Después de la operación en la tarde-noche de ayer a la que fuera sometido el ex marchista Noé Hernández, medallista olímpico de plata en Sydney 2000, los primeros resultados no son alentadores.
El presidente de la Asociación de Medallistas Olímpicos de México, Daniel Aceves, confirmó que el atleta perdió la vista.
"El parte médico nos deja un sabor muy amargo, amargo, porque de entrada ha perdido los glóbulos oculares, es decir, la vista", declaró Aceves, además de advertir que el parte médico indica que el estado de salud que guarda Noé sigue siendo reservado.
Aceves, quien sigue de cerca la evolución del ex marchista en la Clínica de Neurotramautología de la Colonia Bosques de Aragón, acotó además que el deportista "está en un proceso de sedamiento", para ver cómo reacciona en las próximas horas y cómo se van manteniendo los signos vitales.
Noé Hernández, de 34 años, recibió un disparo la madrugada de ayer que le entró por el ojo derecho y salió por el lado izquierdo del cráneo.
"El Chivo" como era conocido se encontraba en un centro nocturno ubicado en el kilómetro 41 de la carretera México-Texcoco. Según la policia municipal, hombres armados entraron al bar y abrieron fuego por razones no especificadas. En el tiroteo fallecieron dos personas y dos más resultaron heridas entre ellas Noé Hernández.