Los días 10 y 11 de noviembre se celebrará la gran final de Cuernos Chuecos, que tendrá como sede la plaza Santa María.
A casi 18 años de haberse creado, este evento que concentra adrenalina a través del deporte extremo que se vive en tan sólo un par de segundos, tendrá la participación de 15 jinetes procedentes de países como Brasil, Guatemala, Estados Unidos y México, que enfrentarán 65 toros con peso superior a la media tonelada.
“Después de 18 años, y de estar a lo largo y ancho de México, podemos decir que Cuernos Chuecos es una realidad. Con una presentación en Estados Unidos, una en Guatemala y todo nace y emerge aquí, en Querétaro”, apuntó Rubén Mújica Vega, director general y fundador del concepto, quien dijo que siempre tienen presente mejorar el evento y ofrecer lo mejor a los deportistas, a los toros y al público.
Mújica Vega agradeció a la Secretaría de Turismo del estado por permitir realizar un trabajo en conjunto, con el respaldo de dicha institución para la realización del magno evento con el que termina la temporada de jineteo de toro.
Por noveno año consecutivo, se entregará una camioneta Ford Ranger para el máximo ganador del rodeo latinoamericano, así como un premio en efectivo de 15 mil dólares, mismos que el gerente y fundador califica como “premios dignos” y sin precedentes.
En palabras de Rubén Mújica, el éxito del evento que cada año congrega a miles de personas se debe al trabajo y coordinación en equipo, mismos que les ha permitido mantener el evento a la vanguardia a nivel nacional, así como siempre tratar de innovar en cada evento que realizan.
Genera empleos. Poco más de dos millones de pesos y la generación de 120 empleos directos son los que deja la realización Cuernos Chuecos en la entidad, así lo señaló Juan Carlos Hachity Ortega, director comercial, que destacó una importante afluencia de personas de otros estados de la República Mexicana.
Se contempla la asistencia de dos mil personas durante los dos días, basados en el registro de quienes han llamado para comprar sus entradas.
