Hay números que se le indigestan al América. Cifras y datos que comienzan desde el nacimiento de los torneos cortos. Uno de ellos es que las Águilas han sido superlíderes después de ganar sus dos únicos campeonatos y han sido eliminadas rápidamente, en cuartos de final, pese a sacar buenos resultados en los encuentros de ida de ambas series.
Sucedió en el Apertura 2002: los de Coapa igualaron 3-3 con Santos, en Torreón, pero luego cayeron 1-2 en el Azteca y se repitió en el Apertura 2005. Derrotaron 1-3 a los Tigres, en el Universitario, y cayeron 1-4, en Santa Úrsula, para quedar al margen.
Ahora igualaron a dos con los propios felinos norteños y la confianza es plena en clasificar, dado que desde el arribo de Ricardo Peláez a la presidencia deportiva, y durante la dirección técnica de Miguel Herrera, los emplumados han sabido romper con mitos, fantasmas y otras maldiciones, tal como lo asegura el propio Peláez.
“Esas son estadísticas”, reprocha, convencido de acabar con ellas. “Tenemos dos años de que ‘el América no gana en tal cancha’, y vamos y ganamos; ‘y Miguel Herrera nunca ha ganado’, y va y gana; ‘y el América nunca...’, y vamos y ganamos. Llevamos cuatro temporadas de más de 30 puntos, afortunadamente, dos semifinales, un título. Entonces, si me dices que cuando empatamos después no ganamos, por la Maldición del Superlíder, pues la vamos a romper”, expone Peláez, sin titubeos.
“Vamos a ganar. La estadística que me digas, la vamos a romper”, desafía. “Es que el América nunca le ha ganado a Tigres a las 5 de la tarde, en domingo”, pues vamos a ganarle a Tigres, a las 5 de la tarde, el domingo; ‘es que Miguel Herrera no ha desayunado huevos rancheros cuando juega contra Tigres’, pues el domingo va a desayunar huevos rancheros y le va a ganar a Tigres, ¿me explico? Todas las cosas que nos inventan, que han venido 35 personas vestidas de morado al Estadio Azteca, cuando el América no gana, pues ahora van a ir 45 personas vestidas de morado y van a ver ganar al América. Son estadísticas y no nos interesa. Nosotros estamos trabajando para ganar y superar las estadísticas que ustedes sacan en cada partido”.
Lejos de atemorizarse con los datos que parecen ir en su contra, Peláez cree posible superarlos. Por eso ve posible la conquista del título en el Apertura 2013, cuando nunca en diciembre un superlíder lo ha conseguido: “Vamos superando retos. El que tenemos ahorita es que llevamos cinco semanas con el equipo dividido, 10 en la Selección y el resto por acá. Se jugaron los últimos cinco partidos y el equipo afortunadamente mantuvo el liderato general”.
Ahora, añade, “regresamos, fuimos y sacamos un muy buen marcador, pese a que muchos venían cansados del viaje a la Selección y otros poco conjuntados con los que llegaron, y aun así sacamos un buen resultado”.
En especial, “esta semana se dio mucho para unir al equipo nuevamente, conjuntarlo, descansar, recuperar a los lesionados y vamos a superar a Tigres con trabajo, no con palabras; no estoy diciendo que vamos a ganar, por decirlo; si Dios quiere ganamos es porque el equipo hace bien su trabajo dentro de la cancha y está convencido de la propuesta del técnico”.