El futbol americano mexicano inicia una nueva aventura. Un intento serio por tener su propia liga profesional que concentre a lo más selecto de los equipos de Liga Mayor tanto de la ONEFA como de la Conadeip.
“México está en un momento para albergar una liga profesional de futbol americano. Este país ha desarrollado su deporte en todas las aristas. Desde los Juegos Olímpicos de Sidney 2000 a la fecha se ha incrementado el número de medallas conseguidas en justas multidisciplinarias, así como el número de atletas nacionales ubicados en el top ten mundial en diversos deportes. Además, varios eventos deportivos de primeras categoría han venido al país”, analiza Juan Carlos Vázquez, director de operaciones de la naciente Liga de Futbol Americano Profesional (abreviado como LFA).
Esta liga arrancará con cuatro equipos de máximo 45 jugadores y seis entrenadores, que disputarán sus juegos en el estadio Jesús ‘Palillo’ de la Ciudad Deportiva. Se tendrá un máximo de dos extranjeros por equipo, del que se presupuesta sea en la posición de quarterback. En tanto que se contempla que el resto de jugadores sean egresados de equipos de la Liga Mayor tanto de la ONEFA como de la Conadeip.
“Todos sabemos que entre los 25 y 27 años los jugadores viven su mejor momento mental y físicamente. Pero, en México, desde los 23 años ya hay jugadores que dejan de tener actividad, así que hay un área de oportunidad gigantesca, porque no hemos visto lo mejor su juego en la Liga Mayor. Yo no veo que nuestra liga sea longeva para los jugadores y los veo participando de tres a cuatro años máximo, porque vendrá el empuje de nuevos talentos. Tan sólo serán 180 jugadores los que albergue la LFA cuando en Liga Mayor tenemos a 43 equipos en la actualidad. Por ello, en nuestra liga estará lo mejor”, destaca Juan Carlos Vázquez.
La LFA arranca con el modelo de la Major League Soccer (MLS), en donde todos los ingresos y jugadores se reparten de manera equitativa, con la intención de que no haya una filial que se vuelva dominadora.
El objetivo ideal es llegar a ser como la Canadian Football League, que es una liga totalmente sustentable y en donde cada equipo mantiene sus finanzas sanas.
“Tenemos visualizado un periodo de dos años para consolidar este proyecto y buscar una expansión futura. Siento que dos temporadas nos marcarán la pauta de si estamos haciendo bien las cosas o miramos para atrás y vemos qué hacemos”, adelanta Vázquez.
Los nombres de los equipos no se dieron a conocer todavía, pues aún se encuentran en etapa de registro ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, ya q ue se busca que tres de las cuatro franquicias tengan el nombre de los patrocinadores interesados en apoyar a la LFA.
Los entrenadores que estarán al frente de alguno de los cuatro equipos son Ernesto Alfaro, Rafael Duk, José Antonio Sandoval y Enrique Zapata, todos con la experiencia de haber participado en staff de coaches de equipos de Liga Mayor.
“Los coaches los escogió Edgar [Zapata, director deportivo]. Se buscaron entrenadores que quieran ganar, con esa mentalidad vencedora, y que tuvieran una trayectoria intachable dentro del futbol americano. Además de que tuvieran disponibilidad de tiempo”, detalla el director de operaciones.
A partir del 17 de septiembre iniciará una preventa de boletos para los 13 partidos que integrará esta primera temporada, para lo cual se negocian los derechos de transmisión televisiva.
De empezar a levantar el interés y las finanzas de la LFA, se tiene contemplado a Monterrey como la primera extensión de la Liga.
“Hay mucha gente que piensa que esto es un asunto de enriquecimiento. El que otros proyectos anteriores no hayan pegado se debe a que mantener un equipo de futbol americano es muy caro. Nosotros estamos en un plan de poner dinero de nuestra bolsa. Los registros de abogados para los contratos y muchas cuestiones más. Lo hacemos porque confiamos en esta Liga”, agrega Juan Carlos Vázquez, que señala a la NFL como uno de los primeros interesados en darle seguimiento a este proyecto.