QUITO.- El novillero queretano Brandon Campos salió por la puerta grande de la plaza portátil Vista Hermosa, instalada en Tambillo, a 30 kilómetros al sur de Quito, al cortar una oreja en su primer astado e indultar al segundo ejemplar en suerte. El rejoneador ecuatoriano Sebastián Peñaherrera cortó tres apéndices, mientras que su compatriota Gabriel Cevallos se llevó un trofeo.
Con un tercio de entrada en los tendidos y una tarde agradable, se lidiaron astados de las ganaderías del Arriero (2), Peñas Blancas (2) y Santa Coloma (2).
El festejo taurino corresponde a la Feria de Quito "Jesús del Gran Poder", que en esta oportunidad se realizó en Tambillo, donde sí se permite la muerte del toro en el ruedo. La ejecución de la suerte suprema fue prohibida en la capital ecuatoriana por consulta popular desde 2011.
El rejoneador Sebastián Peñaherrera lidió dos ejemplares, estuvo acertado con rejones y banderillas, así como con el rejón de muerte, al final cortó tres orejas, dos a su segundo en turno.
El queretano Brandon Campos estuvo voluntarioso ante su primer enemigo de la tarde, demostró valor y oficio, y lo despachó con una buena estocada que le valió el corte de una oreja.
Ante su segundo novillo, Campos logró cuajar una buena faena de capote y muleta a Caprichoso entre las ovaciones del público, un ejemplar negro chorreado, de 340 kilos, procedente de la ganadería Peñas Blancas, de encaste garcigrande.
Al final escuchó el grito de consagración desde las gradas por el indulto, que fue concedido y recibió dos orejas y rabo simbólicos, para que posteriormente saliera de la plaza en todo lo alto.
El criollo Gabriel Cevallos lidió con voluntad a su primero y cortó una oreja, y en el que cerró plaza estuvo oficioso con capote y muleta pero pesado con la espada, por lo que su labor se silenció.
