Con el precio de los boletos en las nubes para al choque por el superliderato entre América y Tigres, la directiva azulcrema justificó la medida, porque “no prohíbe ni restringe la entrada a nadie”. Al tiempo que la afición de Tigres solicitó a la dirigencia norteña negociar un descuento con su homóloga del América, y otro sector optó incluso por asociarse al programa Americanista, con tal de ahorrarse los más de mil pesos que cobra el sistema Ticketmaster por cada pase al Estadio Azteca.
Contrario a su política de precios bajos, el club capitalino abrió todas las zonas del Coloso de Santa Úrsula con un valor, por entrada, de mil 171 pesos, como clara medida para evitar la invasión de seguidores norteños al histórico inmueble, tal como sucedió recientemente en San Luis Potosí.
Sin embargo, con la medida se llevó de corbata a sus propios seguidores y sólo respetó la lealtad de los socios del club, así como de los tarjetahabientes que simpatizan con el equipo amarillo, hecho que disculpó Yon de Luisa, en su calidad de director del Comité de Futbol de Televisa.
“No se le está prohibiendo la entrada a nadie, no se está restringiendo la venta en Monterrey, el que no lo quiera comprar está en su derecho y a todas las personas que han tenido una relación con el club se les da más beneficios y no estamos abusando de la gente que normalmente viene al estadio”, respondió De Luisa a TDN-W, al tiempo que minimizó que sea un problema para la afición regia el alto costo de los boletos. “La gente que haga el viaje hará un desembolso importante por el mismo, no sentimos que un boleto a mil pesos sea para decir viajan o no viajan”, valoró.
Enseguida informó que en la Liguilla “lo más probable” es que volverán a los precios habituales, por lo que se trata de una medida única.
El asunto llegó al grado de que los propios fanáticos norteños optaran por investigar cómo hacerse Americanistas, programa que sustituye al de Socio Águila y que consiste en adquirir una tarjeta de prepago en determinadas tiendas para luego registrarse vía electrónica. La inversión por esta membresía se reduce a 100 pesos anuales, más otros 100 por el costo del boleto, valor de la lealtad a la que se refería De Luisa.
A través de la página solotigres.com, seguidores del club norteño dirigieron una carta abierta al presidente Alejandro Rodríguez, con copia a su homólogo, Ricardo Peláez, del Club América, en la que le solicitan negociar el costo de las entradas.
“Lo único que pedimos es comprar nuestros boletos a un precio justo y considerable”, argumentó el portal, “en representación de todos los seguidores del Club Tigres”.
También los jugadores
A esta vorágine se sumaron los jugadores de ambos equipos. Del lado de Tigres, algunos como Francisco Torres calificaron de “ridículos” los aumentos de la directiva azulcrema. “Va en perjuicio del espectáculo, del futbol en general”, reprochó, por su parte, el español Luis García, también jugador del conjunto regiomontano.
En Coapa, el ex Tigre y hoy contención de las Águilas, Jesús Molina, evitó comprometerse: “Es algo que no me compete, ya es cuestión de la directiva, yo respeto todas las decisiones”, dijo. “Conozco a la afición de Tigres, es muy leal, apoya a su equipo y sé que pueden venir algunos aficionados, no sé si una invasión como en San Luis, pero si se da, qué bueno. Para mí, mientras más gente venga, mejor”, añadió.
En tanto que el lateral izquierdo azulcrema, Miguel Layún, opinó: “Lo que sí espero que estén a un precio accesible para la gente y no que no se pueda pagar”, al tiempo que invitó a la afición americanista “que se haga sentir aquí en casa”, para evitar la referida “invasión tigre” en el Azteca.
Para colmo, De Luisa informó que en la venta especial hubo un fraude a través de internet, que significaría un “golpe de suerte” para la reventa, mediante el cual se vendieron 2 mil 500 boletos en unos minutos. Ni más ni menos. (con información de agencias)