El Tri mira en el horizonte la final del Mundial Sub-17. Está a un partido de alcanzarla. Pero en el camino hacia esa soñada instancia, justo en la semifinal, se asoma la selección de Argentina, la Bestia Negra del futbol mexicano.
Ponerse enfrente de la camiseta albiceleste ha sido un tormento para México. Situación que se recrudece cuando de series a matar o morir se trata. La Selección Nacional suele irse derrotada y eliminada ante la escuadra dos veces campeona del mundo a nivel mayor.
Han sido choques cruentos, en los que la peor parte se la ha llevado el cuadro mexicano. En total, 11 ocasiones se ha visto las caras el Tri contra Argentina en duelos de eliminación directa. Dos han sido para los verdes; el resto, para los sudamericanos.
La primera alegría de México ante los argentinos se dio justo en un Mundial con límite de edad: el Sub-20 de Nigeria 1999.
Aquella generación de entonces juveniles como Rafael Márquez, Daniel Osorno, Mario Méndez y Juan Pablo Rodríguez eliminó en el estadio de Ibadán 4-1 a los albicelestes, para acceder a los cuartos de final de la Copa del Mundo juvenil.
La segunda celebración de los verdes sobre Argentina es de tiempos más recientes: los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011.
Era la disputa por la medalla de oro. México venció por la mínima diferencia en el estadio Omnilife con gol de Jerónimo Amione. El Tri alzó su cuarto título en esta categoría. De ahí en fuera, el dominio de los argentinos ha sido contundente.
En Mundiales mayores, juveniles e infantiles, Copas América, Copa Confederaciones, Panamericanos, la albiceleste le ha propinado duras derrotas a los mexicanos.
Las caídas más recordadas por la afición al Tricolor son las de las ediciones de la Copa del Mundo de Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, en las dos ocasiones en octavos de final donde Argentina se las ingenió para eliminar a México.
En tierras germanas, Rafael Márquez había dado esperanzas de una sorpresa. Pero el empate llegó por conducto de Hernán Crespo. El duelo se fue a tiempo extra, en el que un golazo de Maxi Rodríguez fulminó las esperanzas tricolores (2-1).
Una historia más cruel para México se dio en el pasado Mundial. Dos goles de Carlos Tévez y uno más de Gonzalo Higuaín pusieron un pesado 3-1 en el marcador de los octavos de final de la justa africana y el Tri hizo maletas y se quedó sin el anhelado quinto partido.
Otra ocasión amarga para el balompié nacional fue cuando Argentina le arrebató el trofeo de campeón de la Copa América en la final de la edición de 1993 (2-1).
El martes, México encara a su Bestia Negra en una Mundial. Esta vez es Sub-17 y en el único antecedente que existe en la categoría, los sudamericanos vencieron 2-0.
Por eso la complejidad de la misión que tienen los dirigidos por Raúl Gutiérrez. Ese equipo que suele triturar las ilusiones verdes está en el camino del Mini Tri. Es el último obstáculo para llegar a otra final de la Copa del Mundo infantil.