CANCÚN.— Jorge Villalpando pidió el apoyo de su tribuna. Levantó los brazos y la gente le respondió. Enfrente de él, Jaime Durán llevaba ventaja, sólo tenía que meter un penalti... ¿qué tan difícil puede ser?
Tres, dos, uno... ¡Y Villalpando!, quien surgió del Puebla, dejó fuera de la final de la Copa a La Franja.
El Potro está en la final.
Atlante, que en la Liga da pena, es finalista de Copa. En serie de penaltis, en muerte súbita, venció 5-4 al Puebla, después de que en tiempo regular empataron a un gol.
Los azulgrana se sobrepusieron a todo, porque de todo les pasó en este juego. En el primer tiempo les anularon un gol, que parecía legítimo, lo que se repitió en el segundo.
Y no quedó ahí. Puebla se fue al frente en el marcador, cuando Isaac Romo (71’) definió de punterazo una gran jugada de los dirigidos por Manuel Lapuente. Con la ventaja, parecía que La Franja pondría candado, pero no contaban con un polémico penalti a favor de los locales y que Esteban Paredes concretó (78’).
Quedaba poco tiempo para que el marcador se pudiera mover. Ambos equipos dejaron todo su esfuerzo para la serie de penaltis.
Y vinieron desde los 11 pasos.
Los dos primeros tiros por ambos lados fueron gol; vino la falla de Bizera, por Atlante, y Puebla tomó ventaja, mas no fue por mucho tiempo; en el siguiente disparo poblano, el joven González la voló.
Empatados, venía el último tiro de la serie de cinco. Esteban Paredes, el goleador de los Potros, quien había marcado en el tiempo regular, voló su tiro. Puebla, con Romo, tenía la gloria, pero Villalpando se la quitó.
Vino la muerte súbita. La primera serie fue concretada por Vera, de los Potros, y por Arce, de los poblanos.
Y llegó el disparo definitivo. Venegas, del Atlante, marcó y todo quedaba para el duelo final entre Jaime Durán y Jorge Villapando.
Y Jorge alzó los brazos. Pidió a su público que lo hiciera fuerte. El estadio gritó, como si los gritos pudieran ayudar... Tres, dos, uno y acción. El portero de los Potros, quien nació en Puebla, dibujó su figura en el aire y en el aire detuvo el balón.
Atlante, el Potro que es una caricatura en la Liga, en la Copa es finalista. ¡Quién lo iba a creer!
