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Regresaron a México con los labios secos, las quijadas apretadas... Y la certeza de que son superiores al combinado hondureño.
Mientras los catrachos sueñan con un histórico Aztecazo el viernes, los integrantes de la Selección Nacional les recuerdan que sufrieron para empatarles en San Pedro Sula, hace poco más de cinco meses.
Dos anotaciones en tres minutos permitieron a los centroamericanos rescatar la igualada (2-2) en casa, sufrimiento que fortalece el ánimo de un grupo necesitado de no ceder más puntos en Santa Úrsula.
“Tengo el recuerdo muy fresco. Fue un partido que dominamos los 90 minutos”, comparte el defensa central Héctor Moreno, titular en aquel encuentro. “Dos circunstancias, jugadas. El penalti y en táctica fija nos marcan los goles, pero en sí, en cuanto a ambiente hostil, temperatura en contra, el equipo mostró gran personalidad”.
Lo que argumenta su teoría de que la racha de igualadas en el hogar del Monstruo de las 100 mil Cabezas finalizará pasado mañana.
Derrotar a los hondureños les acercaría a la XX Copa del Mundo, ya que tendrían cuatro unidades más que ellos, con nueve por disputar. No ganar, complicaría más la situación.
“Fuimos mucho mejores que ellos, trabajamos de manera superior... Y no va a ser la excepción”, pronostica el atacante Ángel Reyna, quien observó ese juego desde la banca. “Vamos a trabajar mejor y hay que estar atentos, para no cometer los errores que se tuvieron anteriormente”.
—¿Mostraron que la Selección Mexicana es superior a la hondureña?
“Sí lo demostramos, pero llegó el momento de hacerlo acá”.
Reafirmar por qué sólo ha sacado un empate en seis visitas al Azteca.
La necesidad de conseguir un triunfo en casa aumenta cuando viajan por el tiempo.
Pese a que sumar en la hostil cancha hondureña nunca es despreciable, están conscientes de que dejar escapar los tres puntos abrió una herida que sólo sanará si, por fin, impiden que alguien se lleve parte del botín repartido en Santa Úrsula.
“Cuando fuimos a Honduras, lo hicimos pensando en ganar, lo tuvimos en la bolsa”, lamenta Moreno. “Al final se nos escapó, pero esperemos poder hacerlo aquí en casa”.
Y dejar en claro que son superiores a uno de sus más acérrimos rivales, ese que sueña con dar el máximo golpe en su historia... Al que dominaron durante una calurosa tarde hondureña, pero fueron incapaces de reflejarlo en el marcador.
