El torero Luis Manuel Pérez El Canelo, fue dado de alta del Sanatorio Alcocer Pozo, del Centro Histórico de Querétaro, luego de que el pasado domingo recibiera una embestida del último ejemplar del festival taurino, en el marco de la Feria Nacional de la Pirotecnia del lugar.
El Canelo sufrió peligrosa voltereta con el toro “Bengala” de 400 kilos, de la ganadería Brito. Ésta le provocó la pérdida del conocimiento y una convulsión, por lo que fue atendido en el hospital de Cuautitlán donde se informó que tenía un traumatismo cráneo encefálico y un esguince cervical. Lo estabilizaron y fue trasladado a Querétaro para continuar con su revisión en el sanatorio Alcocer Pozo.
Antes de abandonar el sanatorio, el torero afirmó: “Me siento bien, contento, son cosas que pasan en esta profesión y, como dicen, los toros no dan besos, dan cornadas y dan golpes”.
En el festejo del percance, el diestro compartió cartel con Christian Ortega, Hilda Tenorio y el becerrista Emiliano Villafuerte, y todos finalizaron con el corte de una oreja.
“Las radiografías que se le hicieron nos muestran un esguince cervical de primero o segundo grado, sin afectación a todas las raíces nerviosas. Su condición ha sido estable desde su ingreso, ha estado bien y eso nos hace poder tener confianza en darle de alta con un collarín que le inmovilice el cuello y con una medicación relajante y analgésica. Por lo que se espera que en dos semanas él esté realizando todas sus actividades”, informó el traumatólogo Juan Alcocer Herrera.