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Hacer pugilismo atractivo, el reto

Hacer pugilismo atractivo, el reto
05/11/2014 |00:17
Redacción Querétaro
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La mayor preocupación que tienen los que regulan al boxeo profesional es mantener a este deporte como un espectáculo atractivo para que continúe como una de las disciplinas deportivas más seguidas en el mundo. Para ello, hay diversas opiniones de cuál camino seguir para lograrlo.

El Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ha emprendido un trabajo en conjunto con la Asociación (AMB) y la Federación Mundial de Boxeo (FIB) con la idea de unificar criterios y trabajar en puntos en común. Su principal apuesta es la de cristalizar el sueño de tener un campeón único reconocido por estos tres organismos mundiales.

“El uso de la palabra mundial se ha perdido totalmente. Por eso estamos trabajando con la FIB y la AMB para hacer un torneo de campeones y sacar a un campeón único. Ya si cada organismo quiere tener su propio campeón de su organismo está perfecto, pero que se deje a un solo campeón mundial”, comparte Mauricio Sulaimán, presidente del CMB.

En el interior de la Organización Mundial de Boxeo se apuesta al trabajo coordinado con la Asociación de Comisiones de Boxeo de Estados Unidos (ABC, por sus siglas en inglés), que es una entidad con reconocimiento legal en dicho país con decisiones que superan lo que puedan dictaminar los organismo mundiales.

“El trabajo con la ABC es muy importante para nosotros, porque creemos que si logramos normas que funcionen en todo este país, lograremos un impacto al resto del mundo. Además trabajamos en conjunto con varios senadores para perfeccionar la llamada ‘Ley Muhammad Ali’ que busca cuidar los intereses de los boxeadores pero que aún presenta varias lagunas”, detalla Francisco Valcárcel, presidente de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), con sede en Puerto Rico.

Para la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) la principal preocupación es mantener un estatus de regular las mejores peleas posibles. Apuestan al trabajo coordinado con otros organismos, promotores, televisoras y comisiones con tal de tener las mejores batallas, y así mantener el interés del público.

“Estoy consciente de que el boxeo está vigente entre los aficionados, que lo siguen observando como un deporte noble. Crea muchas oportunidades sociales para los que se dedican a ello. Por ello, si los boxeadores no se enfrentan a los mejores, esto aleja al público porque no ven las peleas que quieren ver. Por ello han crecido en los últimos años otras aficiones como es el de las artes mixtas”, detalla Gilberto Mendoza Jr., vicepresidente de la AMB.

Por su parte, la FIB confía en ser muy estricta con su ranking y las peleas que regula para asegurarse que no se sobrepongan los intereses comerciales sobre sus estatus.

“Seguimos teniendo boxeadores competitivos y cumpliendo nuestras normas. Nuestro organismo sigue creciendo a nivel internacional y creo que nuestros oficiales del ring siguen siendo los mejores del mundo. Una de las cosas de las que estoy muy satisfecho con la FIB es que nuestros peleadores saben que van a recibir un trato justo por parte de nosotros”, presume Daryl J. Peoples, presidente de la FIB.

Los cuatro presidentes de los organismos que regulan el boxeo profesional acuerdan en evaluar que el boxeo vive un gran momento ante las ganancias que se registran con sus principales iconos boxísticos.

“Se tiene un gran momento del boxeo en donde se rompen los récords de todo tipo a nivel comercial, donde, una vez más, es un boxeador el que lleva la marca de ser el deportista mejor pagado de la actualidad como lo es Floyd Mayweather. Se ven peleas de gran nivel, se ven campeones con reconocimiento mundial”, advierte Sulaimán.

“El boxeo está mejor que nunca. No se dan periodos de vacas flacas. Siempre que se va un ídolo, llega otro. Se fue Muhammad Ali, pero llegó Mike Tyson; se fue Julio César Chávez y llegó Manny Pacquiao. Es un ciclo natural que le hace bien a este deporte”, dice Francisco Valcárcel.

Mendoza agrega que el boxeo ha pasado de ser un deporte a convertirse en una “experiencia que todo aficionado quiere vivir de cerca”.