Cinco directivas cometieron un error: despedir a sus managers con apenas un mes de temporada cumplido, o menos, no es la respuesta para encarar la problemática de juegos perdidos, por el contrario, Félix Fermín, manager de los Delfines de Ciudad del Carmen, consideró que la unión y la paciencia son las únicas claves para mantener un conjunto en los primeros lugares como pasa con el conjunto que dirige.
“Es una situación que siempre sucede aquí [Liga Mexicana de Beisbol], los directivos se desesperan bastante, no se dan cuenta de que la campaña es larga y en ella existen baches. Es increíble, ya que apenas estamos pasando el primer cuarto del calendario. Se ha vuelto una costumbre de los dueños y tenemos que respetar eso pues ellos son los que mandan”, sostuvo Fermín quien en 2013 fue nombrado manager del año en LMB.
El panameño resaltó la tranquilidad con la que trabaja en Ciudad del Carmen y en la cual ha mantenido desde el año pasado a su equipo peleando el primer lugar de la Zona Sur.
“Gracias a Dios, los dueños del equipo han confiado en mi trabajo. Ojalá que tomen el ejemplo de Delfines de Ciudad del Carmen los otros dueños por que no se puede tratar de hacer más de lo que tú tienes. Tú tienes que utilizar lo tuyo y sacar el mayor provecho, con la experiencia que tengo yo no creo que con cambios de dirigentes se pueda dar vuelta a una situación”, declaró Félix Fermín, quien lleva al mando de la novena carmelita tres años.
Aunque los Delfines rescataron el último juego de la serie disputada contra Diablos Rojos del México, el canalero apuntó que no fue una buena semana pues sólo rescataron dos triunfos de los seis encuentros que tuvieron en Tijuana y en el DF.
“Sin duda no fue una buena semana, no tuvimos triunfos que queríamos, el relevo nos falló en Tijuana y aquí y perdimos la ventaja de triunfos que teníamos antes de arrancar el viaje”.
Los dos encuentros perdidos en el Foro Sol, fue con unos Diablos Rojos del México que vinieron de atrás para arrebatar el triunfo ante unos relevistas que no supieron resguardar la ventaja, una problemática que Fermín achacó a la altura de la ciudad de México y no en el aspecto del juego, si no en el aspecto mental que afecta en el ánimo de los lanzadores.
“Yo creo que la altura pesa más en el aspecto mental que en el juego de un pitcher. Yo pasé cuatro años en Monterrey y teníamos un tremendo equipo, pero cada que veníamos aquí fallábamos, los lanzadores se creen que no pueden hacer outs o que cualquier batazo se va. Pero Diablos juega la mitad de la temporada en el Foro Sol y saben lidiar con ello, ganan sus encuentros, sin duda que ya es mental que cada equipo que viene aquí creen que este parque es como el paraíso para los bateadores”, finalizó el estratega de los Delfines.