Perder nunca es agradable, pero Ignacio Ambriz, entrenador de los Gallos Blancos de Querétaro, indicó que el ánimo de su equipo no debe de caer, considerando que aún tiene en sus manos el pase a la Liguilla del Apertura 2013 de la Liga MX.
El técnico no pudo estar en el área técnica en la derrota 1-0 en Tijuana, pues cumplía el primero de sus dos partidos de suspensión que la liga le impuso por sus reclamaciones al árbitro Roberto Ríos tras el duelo ante Tigres.
“Aquí lo importante es saber que aun así, con resultados adversos que vamos teniendo, seguimos dependiendo de nosotros, es una realidad”, declaró el estratega antes de realizar el viaje de regreso a Querétaro desde la frontera bajacaliforniana.
Negó que la próxima Fecha FIFA vaya a servirle para replantear demasiadas cosas, pues el duelo ante los Xolos fue cerrado y finalmente se definió en una jugada de buena fortuna para los locales.
“No sé si venga bien o no, creo que fue un partido muy trabado, ninguno de los dos equipos tuvieron muchas opciones de gol y nosotros no fuimos muy claros en el funcionamiento ofensivo y por ahí un descuido faltándonos creo que 10 u 11 minutos nos equivocamos y ellos hacen un gol”.
Sin embargo, el no pretender cambiar muchas cosas no necesariamente significa que Gallos Blancos quiera mantener el rumbo que lleva, pues Ambriz Espinoza aceptó que el equipo debe mejorar.
“Estoy consciente de que seguimos dependiendo de nosotros pero hay equipos que se nos acercan mucho y podemos perder esa [ventaja] faltando todavía cuatro partidos, 12 puntos en disputa, necesitamos recomponer”.
Comentó que otro de los errores del Querétaro en dicho partido de la fecha 13 fue la falta de ambición por conseguir un mejor resultado en la frontera.
“No recuerdo que nuestro portero haya sido muy apurado para poder decir ‘me hicieron cinco ocasiones de gol y por ahí perdimos’. Reitero, fue un partido muy trabado; aunque nosotros funcionamos en ciertos momentos bien defensivamente, pero creo que también nos faltó un poquito más ir al frente”.
Con respecto al cierre de torneo de la escuadra queretana, el timonel dijo que la clave para mantenerse entre los ocho mejores de la liga será ganar los dos partidos que le quedan en el estadio La Corregidora, a pesar de que los rivales sean probablemente los dos mejores equipos del futbol mexicano en la actualidad, América y León.
Estableció que su equipo necesita tener otra vez “intensidad en la recuperación de la pelota, intentar jugar más para adelante para poder sacar en casa esos dos partidos que todavía nos quedan y poder calificar”.
