Veracruz .— Invicto, líder, feliz y ganador. Carlos Reinoso celebra así su cumpleaños 70. Los Tiburones Rojos le regalaron una nueva victoria, la quinta del torneo para mantener la imbatibilidad en el Clausura 2015.
La famosa “ola” recorría las gradas del Luis ‘Pirata’ Fuente. Era el marco que acompañaba el triunfo de los escualos 1-0 sobre el pálido León, que terminó con ocho hombres por las expulsiones de Ignacio González, Carlos ‘Gullit’ Peña y José Juan Vázquez.
Un ‘Maestro’ emocionado, que ha revivido como estratega y goza las mieles del éxito que había extraviado en sus aventuras anteriores. Los escualos que dirige son una escuadra sólida, que va en serio en el torneo y que por primera vez desde la temporada 1991-92 liga nueve partidos sin conocer la derrota. En Veracruz se muestra el poderío de un club acostumbrado a sufrir.
En el puerto jarocho todo es carnaval. La vida se ha vuelto plagada de triunfos y festejos generados por un club que poco a poco se aleja del descenso y se acerca a la Liguilla.
El gol de Édgar Andrade, después de recibir una diagonal mortífera en el área, incrementó las ilusiones del cuadro rojo y azul (39’).
Una definición plagada de talento, donde el canterano del Cruz Azul acomodó el cuerpo para colocar el balón con potencia en la portería defendida por William Yarbrough.
Veracruz amanece como uno de los punteros del Clausura 2015. Los 19 puntos cosechados hasta el momento, le hacen pensar en que la fase final es una posibilidad en una Liga en la que el promedio de clasificación ronda las 25 unidades. A la escuadra jarocha parece que le bastan un par de triunfos más para meterse a la Liguilla.
En el anecdotario sólo queda la expulsión que sufrió Reinoso por parte del árbitro Fernando Guerrero. El chileno se fue a un palco a fumar sus cigarrillos y dejó a su hijo del mismo nombre en el área técnica.
Veracruz pudo hacer más anotaciones a los Panzas Verdes, pero Leobardo López le entregó un penalti a media altura a Yarbrough al 86’.
La gente en el puerto vibra, cree en su equipo, en lo que hace Carlos Reinoso en los entrenamientos diarios. Los Tiburones cada semana se notan mejor, se enracharon y se han convertido en una franquicia sensación.
El ‘Masetro’ no pudo tener un mejor festejo de cumpleaños. Al llegar a sus siete décadas, Reinoso vibra, goza el momento donde sus Tiburones enamoran en Veracruz.
