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DELICIAS, Chihuahua.— Con el cinturón de campeón mundial reposando sobre el pecho fue como Marco Antonio Veneno Rubio arribó a su hotel después de conquistarlo. En ningún momento se lo quiso quitar, ni cuando recibía abrazos de felicitación. Fueron los primeros momentos de gozar su anhelo más preciado.
“Es un sueño cumplido, sabemos que ahorita no lo podemos asimilar muy bien, pero ya mañana [hoy] a ver lo que pasa. Estamos muy contentos de ya tenerlo en nuestro poder”, admitió Rubio, nuevo monarca interino de los pesos medios del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
La noche del sábado, El Veneno (59-6-1, 51KO) se adueñó del cinto con un soberbio nocaut limpio sobre el italiano Domenico Spada (38-5, 19KO), a quien mandó a la lona en el décimo round en pelea disputada en el Gran Estadio de la ciudad de Delicias, Chihuahua.
“Gracias a Dios lo logramos después de todo el trabajo que realizamos para que nuestro sueño se coronara. Esperemos que sigan mejores cosas”, apuntó Rubio, quien ya había fallado en dos ocasiones anteriores por alcanzar dicho cetro.
El Veneno tuvo una noche complicada. Tuvo que imponerse a un peleador marrullero, que se caracterizó por golpes ilegales.
“Él tiene un estilo apestoso [risas], así como lo decimos en el lenguaje de boxeo. Cuando yo me le quería fajar tenía su cabeza dentro de mí. De hecho estos chipotes que tengo son por cabezazos y sus codazos. Creo que me tuve que cuidar más de esos detalles que por tirar”, remembró Rubio.
Ya como campeón interino, el ‘Veneno’ está consiente que el reto es unificar campeonatos con el monarca absoluto que es el argentino Sergio Martínez. Confía en que se respeten los estatutos del CMB y pueda retarlo o, en caso de que el argentino pierda,ir ante el boricua Miguel Cotto, próximo rival del ‘Maravilla’ el 7 de junio.