Buenos Aires.— Ambos conocen el dulce sabor que distingue al néctar de la gloria continental, lo probaron hace años en sus respectivos países, y estaban seguros de que lo volverían a disfrutar con la elástica de los Tigres… Hasta que repararon en que se trata de un club mexicano.
Joffre Guerrón y Rafael Sobis no quitan mérito a la Copa Libertadores ganada por el River Plate, mas sentencian que los árbitros sí le cargan la mano a los representantes de la hoy llamada Liga MX.
Discurso basado en el trabajo del uruguayo Darío Ubriaco, quien sacó varias tarjetas amarillas a los felinos durante los primeros minutos y señaló un polémico penalti de Javier Aquino sobre Carlos Sánchez, aunque no otro por una clara mano del central Arturo Rivas.
“Lógicamente que sí benefició a River”, sentencia Guerrón, monarca de América con la Liga Deportiva Universitaria de Quito (2008). “Si en el primer tiempo le sacan amarilla a la mayoría del equipo ¿qué puedes pensar? Uno ya empieza a jugar con precaución para que no te expulsen… Eso ayuda al equipo rival”.
Sobis tiene una opinión muy similar. El goleador brasileño ganó la Libertadores con el Internacional de Porto Alegre en 2006 y 2010, ediciones en las que no experimentó el desconcierto que le generó el arbitraje de antenoche.
“Hay que matar siempre. Para un equipo mexicano es mucho más difícil [ganarla], porque [Ubriaco] es el árbitro que pitó la final de la [Copa] Sudamericana el año pasado [River Plate vs. Atlético Nacional de Colombia] y después se quedó mucho tiempo sin hacerlo”, denuncia. “[Pasó] algo raro. En los primeros minutos, nos llenó de tarjetas amarillas y, del otro lado con las mismas jugadas, no pasaba algo”.
“No desmerecemos el título del River, pero quien juega futbol, sabe que también debemos enfrentarnos a los árbitros”.
Batalla que fueron incapaces de ganar, pese a que cruzaron el continente con la certeza de que el silbante también les complicaría la existencia en el estadio Monumental.
Ninguno se anima a ofrecer un diagnóstico sobre si el futbol mexicano debería dejar de participar en los certámenes organizados por la Confederación Sudamericana de Futbol (Conmebol), pero están convencidos de que el trato no es similar.
“Seguro que sí se le carga más la mano al equipo mexicano en Libertadores, pero sabíamos de esto, que debíamos jugar contra todo: árbitro y público”, subraya Guerrón. “Sí estamos molestos, pero sabíamos que nos iban a afectar”.
“Hay que analizar el partido. Existieron faltas para un lado y del otro no las pita”, complementa Sobis. “La cuestión de ganar tiempo: le metió una tarjeta amarilla a Juninho por retrasar el partido y después ellos lo hicieron en todo momento”.
Razones por las que consideran que para cualquier club mexicano es “mucho más” difícil ganar la corona de América, pese a que —tras 18 años de participación— se han alcanzado tres finales.