El empate del sábado ante Uruapan no dejó buen sabor de boca al interior de Corregidores FC, cuyo director técnico, Óscar Reyes, señaló que la menor experiencia de sus pupilos en el circuito profesional les jugó en contra en la búsqueda de un mejor resultado.
“Fue un partido muy disputado, nos encontramos enfrente a un rival con mucho oficio, jugadores de gran calidad, se nota que ya traen experiencia en la división, eso es lo que nos complicó, porque estamos trabajando con muchos menores dentro del cuadro titular y en un momento dado se refleja”, declaró el estratega.
Añadió que “los dos goles son por errores muy marcados de los menores, pero de eso tenemos que ir aprendiendo, a manejar ese tipo de partidos, cuando enfrentemos a rivales como lo fue Aguacateros; no nos queda más que seguir trabajando”.
La oncena roja tuvo superioridad numérica durante casi media hora y a pesar de ello sufrió para apenas rescatar el empate; posteriormente falló dos penaltis en la serie por el punto extra, que favoreció finalmente a los Originales Aguacateros.
Además, los queretanos no supieron sacar provecho de las deficiencias técnicas que en más de un par de ocasiones mostró el portero rival, aunque, según lo indicó el entrenador, no fue por falta de instrucciones.
“Sí, fue la indicación, nosotros rebasando tres cuartos de cancha era de empezar a pegarle al arco, tiros de larga distancia era lo que nos tenía que dar resultado de acuerdo con las deficiencias que mostraba el portero”.
Comentó que una cosa es lo que el cuerpo técnico le plantee a los jugadores y otras lo que ellos pueden desempeñar en el terreno de juego, pues ello depende varios factores, en algunos casos externos.
“A veces les cuesta, porque ya son equipos que te exigen más, que te presionan más, con más oficio y fue muy claro, en balones divididos, siempre salíamos perdiendo por esta falta de malicia en nosotros, ser un poquito más cancheros”.
Aseguró que lamentablemente el equipo tuvo más errores mentales que de ejecución, lo que resulta más peligroso.