Eden Praire, Minnesota.— Los Vikings lucen como un equipo a plenitud de cara a los Playoffs, con un coach de segundo año que parece que aprieta los botones adecuados, un quarterback de 23 años con futuro promisorio y una defensiva joven, rápida y agresiva. Estos ingredientes ayudan a mantener una actitud positiva en los jugadores de Minnesota que se enfrentan a Seattle el domingo en el Juego de Comodines de la ANFC. El corredor Adrian Petterson recuerda su primer partido de postemporada en 2009 y desea ir más lejos esta vez y dice que no lo detendrá su dolor en la espalda. “Aquí estamos, 2016. Ahora tengo 30 años de edad. No sé por cuánto tiempo más estaré jugando. Miro en el pasado y me doy cuenta que en verdad no hemos tenido muchas oportunidades. El tiempo pasa rápido cuando no hay Playoffs”. Peterson no practicó el miércoles, ni ayer, para recuperarse de una lesión en la espalda que sufrió en la victoria ante Packers, pero dijo que está listo para su primer partido de Playoffs en cuatro años; será complicado, porque Seattle sólo le cedió 18 yardas en su duelo de temporada regular el 6 de diciembre.