Rafael Puente, técnico de Lobos BUAP, ha cargado con un pesado costal de experiencias en apenas tres fechas del torneo. Su liderato se vio opacado por un pleito extra cancha que mandó a dos de sus jugadores al hospital.
El caso de William Palacios —baja definitiva del plantel— y Julian Quiñones —sancionado con reglamento interno—, se ha manejado de forma hermética por el club y ha sido el técnico, quien ha dado la cara por la institución universitaria.
“Nos vemos muy afectados por esta lamentable situación, pero también somos conscientes que la vida está hecha de eso, de errores y la madurez y el crecimiento como personas radica en tu comportamiento post error”, dijo Puente para la cadena ESPN.
El estratega de los licántropos también reconoció su error al declarar que no sabía de la riña que involucró a sus dos futbolistas y que originó más especulaciones de las que ya había.
“Me tomaron en curva y mi respuesta, insisto, fue equivocada: ‘No sé de qué me hablas, yo fui al hospital a ver a Lucero [Álvarez]’, y efectivamente había ido a ver a Lucero, pero no puedo mentir ya en este momento y decir que no había otros dos integrantes del equipo ahí”, señaló.
Sobre las medidas disciplinarias, Rafa dejó ver que no habrá marcha atrás e informó que en el caso de Julián Quiñones, está descartado para el partido ante Pumas.
“[Quiñones] tiene que cumplir con la sanción que corresponde, porque tiene que quedar claro que si sigue en el equipo, entonces no. La sanción existe y tendrá que cumplirla y será dolorosa y será una llamada de atención”.
Los líderes, aquellos que sacudieron al Querétaro y al Pachuca, aullan problemas previo a la visita a los Pumas.