José Manuel de la Torre es la primera víctima del terrorífico 2013 vivido por la Selección Nacional, aunque Justino Compeán sentencia que nadie está a salvo. In- cluso, el presidente de la Federación Mexicana de Futbol revela que ha pensado dar un paso al costado.

“Por supuesto que la renuncia ha pasado por mi cabeza, pero también debo terminar un proceso y soy responsable de eso, tomo las decisiones”, recuerda el atribulado directivo. “Estar al frente en una situación tan compleja es nada envidiable. Le hemos apostado a un proceso y estoy al frente de éste”.

“El 13 de septiembre cumpliré siete años al frente de la Federación. Hay cosas buenas, difíciles y esta es extremadamente complicada. La tengo que sobrellevar. En mi espalda está esa responsabilidad”.

Aunque los daños colaterales podrían ser incalculables si el Tricolor no consigue el boleto a la XX Copa del Mundo.

Más allá de que El Chepo se ha ido y es un misterio si Luis Fernando Tena concluirá el hexagonal, el organigrama directivo sería sacudido en caso de consumarse el fracaso.

“Sé de la responsabilidad que tengo en mi área y estoy en manos del presidente [Compeán]”, admite Héctor González Iñárritu, director de Selecciones Nacionales. “Son tres partidos en los que todos aquí estamos jugándonos la vida”.

“No pasa por mi cabeza el no clasificar y sí la responsabilidad que tengo”, complementa el titular de la FMF. “Obviamente, mi posición está en juego”.

Contemplan pasar por repechaje

Ubicarse en el cuarto sitio de la clasificación, con tres partidos por jugar y a dos unidades de Honduras (actual tercer sitio), hace inevitable pensar en el escenario de tener que jugar dos partidos extra en la búsqueda del boleto mundialista. Serían contra Nueva Zelanda, campeón de Oceanía, durante noviembre.

“Tengo que reconocer, y le he pedido a Héctor [González Iñárritu], porque debemos tomar las medidas y estar enfrentando la posibilidad del repechaje”, concede Compeán. “El resultado de ayer [viernes] nos deja exactamente en el camino de estar en tercer lugar o la reclasificación”.

“Por lo tanto, con toda honestidad, tenemos que empezar a trabajar y él debe tomar las medidas para que, si se llega a dar, estemos preparados. No queremos estar ahí, desde luego, pero sí tenemos que tomar las precauciones y medidas si el caso llegar a ser el repechaje”.

Penoso escenario que fungiría como salvavidas de un proceso al que se le tuvo fe ciega, aunque Compeán sentencia no arrepentirse por su casi infinito respaldo a De la Torre.

“Espero no arrepentirme de seguir apoyando el proceso del cuerpo técnico, que lleva tres años trabajando, en el que ahora Luis Fernando está al frente”, confiesa.

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