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Es una revancha para los dos boxeadores. Para Vic Darchinyan la pelea de mañana en Corpus Christi significa vengar la primera derrota que sufrió en su carrera, y para Nonito Donaire es la oportunidad de recobrar el paso, después de que tropezó este año con Guillermo Rigondeaux.
“No era algo que yo quería, pero creo que es justo porque Darchinyan me dio la oportunidad de enfrentarlo cuando él era campeón, ahora me toca a mí. Aunque no es de campeonato, creo que será un combate que impulsará la carrera de alguno de los dos”, comentó Donaire.
El filipino espera que su velocidad y su gancho de izquierda vuelvan a ser sus mejores herramientas para derrotar al armenio.
“Creo que soy más veloz y con la izquierda lo puedo apretar”.