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Dos objetivos tiene Miguel Ángel Mikey García: volver a ser campeón del mundo y reinar invicto en diferentes categorías, como lo hace Floyd Mayweather Jr.
La primera misión la puede consumar mañana, cuando suba al ring en Corpus Christi para retar al campeón superpluma de la OMB, Román Rocky Martínez. La segunda encomienda está planificada para finales del próximo año o principios de 2015.
“Estoy preparado para volver a ser campeón. Esta pelea me llegó rápido y no pienso desaprovecharla. Creo que tengo muchas condiciones para repetir lo que ahora hace Mayweather”, señaló García, quien vaticinó que vencerá al único rival que por ahora lo ha derrotado; la báscula.
“Me dolió mucho perder mi título al no dar el peso pluma, pero ahora me sometí a una preparación con nutriólogo, trajimos [al equipo] a Alex Ariza para que nos acompañara en los entrenamientos y estoy seguro de que con él y el equipo de trabajo no sólo puedo llegar a ser campeón en 130 libras, sino en peso ligero también.
En junio de este año, el mexicano fue despojado de su cinturón pluma por no dar el peso. Con el cuerpo lleno de calambres, vista nublada, manos entumidas, vómito constante y un desmayo a horas de la pelea, García subió a combatir, a pesar de la deshidratación que sufrió. La vergüenza deportiva y su talento fueron la fórmula con la que noqueó en cuatro asaltos al puertorriqueño Juan Manuel López. Sin embargo, el triunfo no supo igual para Mikey.
“Tenía un sabor amargo, perdí el título en la báscula, me confié. Antes no había tenido problemas con el peso, pero mi cuerpo creció, me costó mucho y no pude bajar a las 124 libras”, recordó.
Con el 84 por ciento de sus triunfos firmados por la vía del cloroformo, a Mikey García no le da miedo pronosticar otro nocaut.
“Cuando una persona paga un boleto para verme pelear, lo más seguro es que verá un nocaut. Me entrego en el ring y trato de terminar rápido a mis rivales”.
Desde 2010, García ha ganado todos sus combates por esa vía; 10 rivales en tres años han probado el poder de su pegada, misma que, sentencia, será la misma aunque suba de categoría.
“No tengo miedo de que mi pegada pierda fuerza, no hay mucho diferencia entre pluma y superpluma, creo que voy a tener la misma, ya lo van a ver”.
Miguel Ángel García subraya que a pesar de que nació en California, él es mexicano y representa al pugilismo azteca. “Hay gente que no me quiere ver como mexicano, yo soy orgulloso de pelear como mexicano, mi familia es de Michoacán; yo no tuve la culpa de nacer en California, pero soy mexicano”.