MONTEGO BAY, Jam.— La Selección Femenil Sub-17 de México logró la hazaña al derrotar en tanda de tiros de penalti 4-2 (global 5-3) a Estados Unidos, para calificar a la Copa del Mundo de Costa Rica 2014 y de paso eliminar a la potencia del orbe.
La portera Emily Alvarado se convirtió en la figura del Tricolor al detener un par de disparos a las estadounidenses Taylor Racioppi, en primera tanda, y a Zoe Morse, en la cuarta ejecución.
La escuadra tricolor inició la serie con Rebeca Bernal, siguieron Eva González, Miriam García y Arlett Tovar, quienes concretaron en fila por el cuadro dirigido por Leonardo Cuéllar, para lograr su clasificación por tercer proceso en fila al Mundial Sub-17.
En los cobros de Estados Unidos, Emily Alvarado detuvo a Taylor Raccioppi el primero, Tegan McGrady acertó el segundo, Mallory Pugh concretó el tercero y Zoe Morse no pudo batir a Alvarado en el cuarto penalti, para que se decretara el triunfo mexicano.
El seleccionado que comanda Leonardo Cuéllar se fue al frente en la primera llegada que generó, en un remate de cabeza de Briana Woodall a los cinco minutos de juego, con lo cual acabó con la imbatibilidad de las estadounidenses, mismas que se fueron en blanco en su arco en toda la ronda inicial ante Trinidad y Tobago (11-0), Guatemala (7-0) y Canadá (2-0).
De hecho fue el primer tanto que las estadunidenses Sub-17, dirigidas por BJ Snow, reciben en mil 223 minutos.
Vino la reacción lógica del rival de México, que empezó a presionar en busca de la igualada, que llegó en el 27’, en jugada que definió Madison Haley, luego de tres acciones de real peligro.
En el complemento, la escuadra mexicana tuvo una aplicación táctica casi perfecta a la defensiva y controló los embates de su rival.
Concluyó el partido tras ocho minutos de reposición y el 1-1 forzó a que el primer boleto a la cuarta Copa del Mundo de Futbol Femenil Sub-17 Costa Rica 2014, se definiera desde el manchón penal.
Ahí, en tanda que comenzó el representativo mexicano, su arquera Emily Alvarado se convirtió en la figura al detener el primer envío a Taylor Racioppi y el cuarto a Zoe Morse, para que se concretara la ansiada calificación al Mundial.