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Hay quienes tuvieron una razón adicional al orgullo para alegrarse por la clasificación del Tricolor a la Copa del Mundo: aquellos que invirtieron millones de dólares para asociarse comercialmente con la Federación Mexicana de Futbol.
Pocos como Coca-Cola, uno de los cinco patrocinadores senior de la Selección Nacional. Hoy todo es ilusión y ganas de escribir historia, pero directivos de la refresquera admiten el sufrimiento experimentado durante el sinuoso camino a la máxima justa futbolística del planeta.
“Obviamente, estábamos nerviosos, como cualquier aficionado mexicano”, revela José Luis Basauri, director de la marca de la bebida en este país. “Encendíamos la televisión, echando la mejor vibra para tratar que México pasara”.
“Queríamos que fuera y estamos muy contentos de que así sea, pero realmente nuestra asociación con FIFA va mucho más allá de un torneo. Llevamos más de 40 años de ser socios, porque creemos en promover valores”.
La refresquera patrocina el tour mundial del trofeo que será entregado al campeón de Brasil 2014, que permanecerá en México hasta pasado mañana.
“A veces se puede ir [a la Copa del Mundo], otras no, pero lo más importante es nuestro compromiso, que es con los mexicanos, el deporte”, aclara Basauri. “Si a veces nos toca no ir, ni modo, pero estamos felices de que ahora sí”.
Mutis de FIFA
Jan Schetters, vocero oficial de la Federación Internacional de Futbol, prefiere no opinar sobre las muertes —por accidente— de los trabajadores que laboran en las obras de los estadios que albergarán el Mundial.