San Francisco.— Es el Jugador Más Valioso del Super Bowl 50 y también es agente libre. El linebacker Von Miller, sin embargo, no se preocupa por su situación contractual con los Broncos de Denver y prefiere gozar el momento con sus compañeros de equipo.
“El anillo de Super Bowl es algo que voy a conservar por siempre, el resto de mi vida. Podré estar junto a mis hermanos eternamente. Podré estar con ellos otros 100 años y eso es hermoso”, dijo Miller en su última conferencia de prensa en el área de la bahía californiana.
“Y con respecto a mi situación, tenemos a John Elway [vicepresidente ejecutivo de operaciones y gerente general], quien ha jugado en la NFL. Es uno de los mejores (gerentes generales) que hay. Estamos aquí por él. Tengo gente que se encargará de mi situación y creo que va a ser una cosa pacífica. No estoy preocupado. Yo sólo quiero disfrutar a mis compañeros de equipo, celebrar con ellos”, agregó.
Miller, quien tuvo dos de las siete capturas de los Broncos y forzó dos fumbles, se dijo feliz por haber ayudado a Peyton Manning a conseguir otro título de la NFL.
“Fue un esfuerzo de equipo. Si no hubiera sido por Peyton y esas decisiones de lanzar pases cortos para que pudiéramos despejar y luego tener el balón de regreso... Realmente fue un esfuerzo de equipo. Todo el mundo está acostumbrado a ver a Peyton salir y anotar 45 puntos por juego. Este año, fue diferente. Todos tuvimos un porcentaje en este triunfo en el Super Bowl”, comentó.
El décimo defensivo que es nombrado Jugador Más Valioso del Super Bowl no quiso comparar a la de los Broncos con otras grandes defensas que han ganado campeonatos, como la de Bears de Chicago en 1985 o la de Ravens de Baltimore en 2000.
“No me gustan las comparaciones. El juego es así por los jugadores que han estado antes que nosotros. Todas esas grandiosas defensivas, todas dieron todo por el juego. No me gustan las comparaciones, pero el tipo de defensiva que jugamos este año fue especial. Pasamos mucho tiempo juntos. Tengo compañeros de equipo que pasaron un par de semanas en mi casa. Verdaderamente fue un ambiente familiar. Creo que de ahí viene nuestro éxito”, dijo Miller.
Sin restarle mérito, aseguró que Wade Phillips, coordinador defensivo de los Broncos, no hizo nada mágico en la temporada, y recordó a algunos de los coaches que creyeron en él, incluido John Fox, quien fue sustituido por Gary Kubiak de cara a la campaña 2015.
“Hemos tenido grandes coaches. Puedo recordar los primeros que creyeron en mí. El coach [John] Fox y [Richard] Smith. Si no hubiera sido por ellos —que ya no están en el equipo— dándonos el significado de jugar en la NFL, probablemente yo no estaría hoy aquí. Para el coach Phillips ya teníamos un equipo talentoso. No fue nada mágico que Phillips hiciera, tampoco un esquema mágico. Pero sí tiene una personalidad mágica. Es un tipo de 68 años de edad con mucha energía”, mencionó.
Finalmente, se dijo emocionado y satisfecho por su mejor amigo en el equipo, el también linebacker DeMarcus Ware, quien en su undécima campaña finalmente pudo ganar un título de la NFL.
“DeMarcus es todo lo que… realmente no tengo palabras. Es un líder. Es como un hermano mayor para mí. Es un coach, un mentor. Es algo que tengo muy cerca del corazón. Recuerdo cuando llegué y vi a DeMarcus y la pasión con la que juega. Quise imitarlo. Y haberle ayudado a lograr esta grandeza es algo que recordaré siempre”.