Tenía que llegar y ayer ocurrió, pero fue ante el último lugar general, por goliza y evidenciando fallas puntuales que fueron ocultadas por la racha de victorias pasadas.
Cruz Azul perdió el invicto, el rumbo y el intento de romper la marca de juegos ganados en forma consecutiva. Y fue vapuleado.
Tigres, que sólo había anotado tres goles en todo el torneo, se destapó y metió tres sin respuesta, tres con toda legitimidad, que le dan tres puntos para salir del fondo de la tabla y meterse a la pelea por los puestos de calificación. Ahora tiene 11 unidades, por 25 de los Cementeros.
Ayer, La Máquina vestida de rojo salió sangrada del estadio Universitario por un error puntual al inicio del juego.
Juninho, de penalti. Alan Pulido, con remate de cabeza, y José Francisco Torres, en la agonía, fueron los verdugos de los Cementeros, que ahora se deberán concentrar en disputar los cuartos de final de la Concachampions, el miércoles, ante el Kansas City de la MLS.
El error de La Máquina comenzó desde el vestidor. Luis Amaranto Perea, cansado del largo viaje con la selección de Colombia, se quedó en la banca y en su lugar, Luis Fernando Tena puso al joven Manuel Madrid, quien con sólo tres juegos en Primera, vio en el cuarto lo que es en realidad el futbol de los grandes.
En el inicio, el joven cometió una falta que provocó penalti. Juninho lo convirtió en gol y Tigres puso el clima a su favor. Cruz Azul intentó reaccionar, pero dejó espacios y por ahí Carlos Salcido entró para mandar un buen servicio a Pulido, para el segundo en favor de los felinos. Otra vez Madrid perdió la marca.
Cruz Azul trató de responder a su estilo, pero Tigres estaba preparado para eso y mucho más. A pesar de tener el balón, los capitalinos no generaron y se hundieron en la desesperación.
Si hubo un pecado en Tena fue quizá el no hacer los cambios a tiempo. Tardó en meter al Chaco y a Nápoles y nunca se notó que se tenía ventaja numérica al ser expulsado Salcido (al 63’).
Marco Fabián sacó un disparo que envió el balón al poste, pero fuera de eso, nada.
Así, en el mundo al revés, el último le ganó al primero para salir del sótano. Tigres se sacó la lotería y Cruz Azul no perdió el liderato, pero sí el invicto y el glamur, contra quien en teoría, debía ser un rival sencillo.
Desde 2005 no caían los llamados cuatro “grandes” en la misma fecha
Así, los cuatro “grandes” del futbol mexicano: Guadalajara, América, Cruz Azul y Pumas mordieron el polvo en la misma jornada, lo que no sucedía desde la jornada 12 del Apertura 2005, hace casi 9 años.
