Monterrey.— Tigres dejó ir a su presa en los últimos minutos. Los felinos regios tuvieron en su mano al River Plate, que estuvo a punto de quedar eliminado de la Copa Libertadores 2015.
Pero la soberbia fue más que el honor. Los de Monterrey se dejaron llegar, se dejaron alcanzar, cuando tenían dos goles de ventaja, y los argentinos en el último minuto de juego lograron empatar para tener esperanzas de seguir en el torneo.
Tigres, a pesar de todo, terminará la fase de grupos como líder. Llegó a 11 puntos y nadie lo bajará de la punta del Grupo 6, en tanto que los Millonarios, desahuciados a su llegada, salieron con esperanza de resurgir. Sumaron una unidad, quedaron en cuatro y ahora sejugarán todo en la última jornada contra el San José de Bolivia, al que tiene que derrotar, esperando que el conjunto mexicano vaya a Perú y le gane al Juan Aurich.
Cuestión de sumas.
Mas el mal sabor de boca con que se quedó la gente de La Sultana del Norte fue lo más doloroso. Tigres echó toda su buena primera fase por la borda en cuestión de imagen. El equipo mexicano se “agrandó” como los argentinos, se creyó de más cuando lo importante es terminar.
A River Plate, durante los años 40 se le llamaba La Máquina. Su modo de jugar y los jugadores que tenía José Manuel el ‘Charro’ Moreno, Adolfo Pedernera, Ángel Labruna y Félix Loustau, eran simplemente insuperables.
Pero quien inició como una verdadera máquina en el partido fueron los Tigres. Los felinos salieron a morder a las también llamadas Gallinas, no dejándolos tener el balón, moviéndolo por todas partes, creando situaciones claras de gol.
Tigres fue ancho y largo. Por las bandas, Guerrón y Damián Álvarez entraron con total libertad. Por ahí llegó el balón a Egidio Arévalo, quien con disparo de fuera del área, muy colocado, abrió el marcador (11’).
Juego justo como le gusta al ‘Tuca’.
A partir de ese momento, el cuadro regio “jugó” con su rival. River trató, pero no llegó a los límites del área de Nahuel Guzmán, quien tuvo un día de campo, casi todo el partido.
En el segundo tiempo, con la entrada de Édgar Gerardo Lugo, los felinos tuvieron creación, tuvieron profundidad y así, Damián Álvarez anotó el segundo. El ex de River, no festejó por respeto a su pasado.
Tigres no metió “tercera”. El cuadro mexicano comenzó a ‘cascarear’, luciéndose más que pensar en seguir haciendo daño al rival.
Grave error.
Vinieron los minutos finales. Un largo despeje del portero Barovero fue mal medido por Hugo Ayala. El balón le quedó a Mora, quien disparó, Guzmán rechazó, pero Teófilo Gutiérrez aprovechó el rebote y marcó (86’).
Ni así Tigres despertó.
Vino un centro de Gutiérrez, el balón fue a las afueras del área, donde Rodrigo Mora lo tomó de aire para enviarlo al fondo de la portería.
Ferretti lanzó todo tipo de maldiciones, su equipo dejó vivir a un grande, y un grande tiene más de siete vidas. La noticia buena, quedó como primer lugar de grupo.