Allá, cerca del Cerro de Quinceo, Carlos Bustos está de incógnito. Junto a Pedro Caixinha, de Santos, y Antonio Torres Servín, de los Pumas. Son los novatos de la Liguilla, y esa novatez “puede ser la sorpresa”.
“Estoy consciente de que puedo ser la incógnita, de que no muchos me conocían, pero ahora en el futbol, ya no hay secretos”, dice el argentino, quien jugó para Morelia y Pachuca entre los clubes del futbol mexicano.
Ahora, como técnico, Bustos ha transformado a los Monarcas. Desde que llegó, el equipo michoacano no ha perdido; lleva 10 duelos sin conocer la derrota y cuatro victorias consecutivas.
“Obviamente estoy contento con la calificación, con la buena racha, el mérito es todo de los jugadores; adquirieron un gran compromiso y lo han cumplido”.
Tan lo han cumplido, que están en Liguilla para enfrentar a Cruz Azul en cuartos de final.
“Es otro torneo, donde cada equipo se enfocará a sus cruces. Yo ya me enfoco a Cruz Azul, un rival durísimo, que vive un gran momento. Cruz azul es lo único que tengo en la cabeza”.
—¿Quién llega mejor. Cruz Azul tiene cinco victorias seguidas?
—Son momentos de los equipos. Pero también creo que Morelia está muy bien. Serán dos partidos muy lindos.
—¿De muchos goles?
—No lo sé, no estoy tan seguro de eso. Ellos son la mejor ofensiva, pero nosotros los podremos controlar y tratar de agredirlos en la contra.
Bustos dice que si pudiera elegir oponente para la final, le gustaría el Atlas de Tomás Boy, el técnico que le abrió las puertas en México.