Eduardo Lara, uno de los tres sablistas queretanos que irán al Campeonato Mundial de Esgrima de Mayores en Kazán, Rusia, que inicia en seis días, charló con EL UNIVERSAL Querétaro.
Eduardo ha tenido un gran año al ganar la mayoría de las competencias nacionales, incluida la pasada Olimpiada Nacional donde fue el mejor atleta hombre del estado al cosechar cuatro preseas, tres de oro y una de plata.
Uno de mis objetivos para este año era calificar al Campeonato Mundial de Mayores. Estoy muy feliz de haberlo logrado y ahora sólo me queda dar todo mi esfuerzo para poder representar dignamente a mi país.
Creo que cualquier esgrimista que haya calificado a este Campeonato es digno de admiración. Sólo los mejores cuatro de cada país pueden asistir, por lo tanto los mejores esgrimistas del mundo van a estar presentes. Esta oportunidad de poder enfrentarme a ellos es algo que he estado esperando para poder poner a prueba mis límites independientemente del resultado.
Este honor me deja un buen sabor de boca. Es bueno ver que los sacrificios que he hecho para estar aquí dieron resultado, pero eso no significa que haya acabado con mi entrenamiento, todavía tengo muchas cosas que aprender dentro de mi deporte. Más que generarme una presión extra me genera una nueva meta.
El entrenamiento en el extranjero es distinto al entrenamiento de México. Tanto allá como aquí tenemos carencias y virtudes. Los entrenadores de México son muy capaces de hacer su trabajo, y hemos tenido la oportunidad de trabajar con varios. La diferencia es al momento de practicar. En el club en donde hemos estado entrenando en el extranjero hay mucha variedad de tiradores. Hay gente de Estados Unidos, Japón, China, Polonia, con la que podemos entrenar y competir día a día. Esa oportunidad de estar con ellos nos ha ayudado a mejorar nuestras habilidades y a abrirnos a aprender de ellos y ellos de nosotros.