De crisis “no hablo”, ataja José Luis Trejo, “porque no hay crisis”, precisa en su clásico acento parsimonioso.
En las redes sociales, los exigentes fanáticos auriazules reclaman a la directiva de Pumas la salida del director técnico, ante la sucesión de tropiezos en el incipiente Apertura 2014, mas él ni siquiera otorga la categoría de “crisis” al mal momento.
“Simplemente estamos arrancando el torneo”, se defiende Trejo, al término de la práctica realizada en el estadio Olímpico Universitario.
Días atrás había justificado el par de tropiezos —ante Chivas y Toluca— al considerar “contraproducente” jugar contra 10 oponentes, lo cual desde otra óptica sería catalogado como ventaja, pero no en la del estratega felino.
—¿Está tranquilo en su puesto? —se le cuestiona.
“Sí... ¿Cuál es la otra pregunta?”, abrevia.
—¿Qué opina de la gente que lo critica?
“Siempre habrá, siempre existe, es una parte normal. Es entendible, nada más”.
—¿Molesta que la directiva salga a darle apoyo cada rato? —indaga alguien más.
“Es una situación que, siendo Pumas es muy normal. Así que ante estas circunstancias te acostumbras”.
Trejo hace memoria y espera que así como en el semestre anterior salieron del apuro, ahora ocurra lo mismo. “En su oportunidad lo hicimos y así va a ser esta vez. Así que hay que mejorar”.
Enseguida, el estratega universitario guarda en el baúl de lo habitual las reuniones semanales con el presidente del patronato, Jorge Borja y hasta presume el reciente triunfo —en la Copa— a costa del descendido Atlante, celebrado en Cancún.
“Tranquilidad siempre ha existido, de todas maneras nos vino bien haber ganado para ver a algunos de los elementos que no participan normalmente y a algunos otros jóvenes”, afirma.
La preocupación de Trejo se encapsula en el riesgo de que ahora el Atlas especule, el próximo domingo en CU.
“Sí, ese es un aspecto que siempre estamos tocando, cómo se presentan los rivales aquí en CU y ese es el punto a tratar, en eso estamos ocupados”, explica.
Eso sí, internamente Pumas se halla “excelente, es una de las partes en las que tengo tranquilidad, hay camaradería, buena comunicación, disposición, disciplina, aspectos claves para un buen grupo. Este sentido estoy tranquilo”, resuelve Trejo, feliz en su mundo auriazul.