Nueva York.— La cadena de medios informativos de deportes ESPN publicó un extenso reporte de lo que ha sido de los Patriots de Nueva Inglaterra desde que se dio a conocer el caso del ‘Spygate’, en 2007, hasta el ‘Deflategate’ de la temporada pasada.
Durante el domingo inaugural de la campaña 2007, en la primera mitad del encuentro de Nueva Inglaterra frente a los Jets, un asistente de los Patriots, Matt Estrella, fue sosprendido grabando las señales defensivas de los coaches de los Jets, lo que fue el inicio del escándalo conocido como ‘Spygate’.
Tras darse a conocer dichas acciones tramposas de los Patriots, el comisionado de la Liga, Roger Goodell, ordenó que se destruyeran todas las pruebas y evidencias de este caso (videos, grabaciones, libros de jugadas, documentos), lo que llamó la atención del senador Arlen Specter, quien deseaba abrir una investigación en el congreso por la eliminación de la evidencia.
“Goodell no quería que alguien supiera que su franquicia dorada [Patriots] ganó Super Bowls con trampas”, comentó un ejecutivo cuyo equipo cayó contra Nueva Inglaterra en años recientes. “Si eso hubiera salido a la luz dañaba su negocio”.
Pero esa historia se quedó en el pasado, con una sanción de 500 mil dólares para Bill Belichick, el coach; 250 mil dólares para el equipo y el quitarles su pick de primera ronda del Draft 2008. Se dio ‘carpetazo’ al asunto.
La temporada pasada, y a lo largo de ocho meses, la NFL ha lidiado con un nuevo escándalo en el que están inmersos los Patriots, el famoso ‘Deflategate’, en el que se presume que personal del conjunto y el propio quarterback, Tom Brady, estuvieron al tanto de que jugaron con balones inflados por debajo de lo mínimo permitido por la NFL en el partido por el título de la Conferencia Americana (AFC), contra los Colts de Indianapolis. Nueva Inglaterra ganó 45-7.
Los equipos que juegan de visita en el Gillette Stadium temen que muchas cosas extra cancha sucedan allí. Por ejemplo, algunos se han quejado que sus audífonos, con los que mantienen comunicación con los jugadores en el campo, simplemente fallan. Las pantallas de video en el estacionamiento del estadio muestran repeticiones a las que sólo tienen acceso el personal de los Patriots. También se sospecha de espías en los casilleros. El propio Peyton Manning dice que teme que el vestidor de los visitantes esté intervenido por diversos equipos de grabación de audio y video.
Otra acusación en el reporte de ESPN dice que algunos de los empleados de los Patriots tratan de robarse la hoja de jugadas de los primeros ‘drives’ de las ofensivas rivales.
“Ex empleados de los Patriots insisten en que grabar las señales no es la forma más efectiva empleada por equipo en la era del espionaje. Afirman que durante el calentamiento, empleados de Nueva Inglaterra iban a los vestidores de los visistantes para robar el plan de juego donde venían las primeras 20 jugadas ofensivas. Esta práctica se hizo tan notoria que algunos entrenadores colocaban planes de juego falsos”, consigna el reporte. Especialistas consideran que al conocer las primeras 20 jugadas, se anticipa el resto del plan de ataque.