Edgar Sosa (51-8, 30KO) es de esos boxeadores que se resisten a morir. De los que se levantan con más fuerza de cada caída y que siguen lanzando golpes pese a parecer estar en las últimas. A sus 35 años, aún sueña con volver a ser campeón mundial. Y, pese a dos fallos en peleas titulares, de nuevo se encuentra cerca de otra oportunidad.
“Mi ilusión es volver a ser campeón del mundo una vez más. Sé que las cosas se miran muy difíciles y complicadas; sin embargo, nunca es tarde para coronarse. Hemos visto a campeones lograrlo después de que resurgen; peleadores que estaban en el fondo y vuelven a un título. No es mi caso porque yo me encuentro número dos de la clasificación mundial, con un nivel constante”, advierte Sosa en su visita a EL UNIVERSAL.
Edgar el ex campeón del mundo. El pugilista que conquistó el título minimosca del Consejo Mundial del Boxeo (CMB) tras vencer al hawaiano Brian Viloria en 2007 y que lo defendió con éxito en 10 ocasiones hasta que, finalmente, un cabezazo al rostro en polémica pelea ante el filipino Rodel Mayol, en 2009, le arrebató el cetro; además de provocarle una fractura facial del cual le tuvieron que poner una placa de metal en el hueso maxilar izquierdo.
Desde entonces, ‘Ironman’, inicio el camino más áspero de su carrera boxística. Un largo sendero por recobrar la gloria de un campeonato mundial, en un sueño del que se niega a renunciar. Ese pensamiento es lo que lo mantiene disciplinado en el gimnasio.
“Quiero continuar todavía en la elite del boxeo mundial a pesar de que tengo 35 años, me encuentro todavía en buenas condiciones físicas y anímicas. Se vislumbra que este año pueda ser mi última gran oportunidad de volver a ser campeón del mundo, pero no pienso en el retiro aún. Me encuentro físicamente bien todavía. Nos aferramos a la idea de este año coronarnos”, afirma el capitalino.
Sosa ya tuvo una primera oportunidad, ya en la división mosca, ante el tailandés Pongsaklek Wonjongkam, contra quien perdió por decisión unánime en 2011. Así también cayó en un segundo chance en pelea disputada contra el japonés Akira Yaegashi. Ambas batallas de visitante y las dos en la lectura de las tarjetas.
“Desafortunadamente no he ganado los combates estelares por el campeonato en Tailandia y Japón, pero estoy seguro y convencido que una tercera vez será diferente. Han sido situaciones extradeportivas las que nos han afectado anímicamente y sicológicamente, pero esta vez me encuentro muy maduro en todos los aspectos. Espero que este año se de una nueva oportunidad para conquistar el campeonato del mundo”, se esperanza.
Esa tercera oportunidad está latente pues Edgar Sosa se mantiene como el clasificado dos del CMB, aunado a que en la pasada convención anual de dicho organismo se le colocó en una eliminatoria directa para, de salir con la victoria, ser considerado el retador oficial del actual monarca nicaragüense Román ‘Chocolatito’ González.
Por esta posición es que se resiste a colgar los guantes. Sólo se trata de un capítulo en la carrera de Sosa que, a lo largo de 15 años sobre los enlonados, ha vivido lo mejor y lo peor que ofrece el mundo del boxeo.
“Muchos peleadores han conquistado títulos mundiales hasta la cuarta o quinta ocasión. Además, vemos a boxeadores con 37, 38 o más años en un gran nivel boxístico. Así que, con estos ejemplos, yo todavía quiero seguir picando piedra, echándole ganas y trabajando fuerte”, resalta Sosa, el indestructible del boxeo.