“Quisiera que hubiera sido una pesadilla y empezar a jugar, pero ya pasó”, dijo notablemente dolido y molesto el técnico de Gallos Blancos, Jaime Lozano, luego de la caída que sufrió el cuadro queretano ante Atlas.
“Qué más quisiera que no fuera verdad”, subrayó el estratega de los queretanos luego de la derrota que le propinara el cuadro tapatío.
Indicó que el sábado los jugadores del cuadro queretano no pudieron, y es que hay ocasiones en las que no salen las cosas, no se acomodan en la cancha y por más esfuerzos que se hagan no se dan los resultados.
“No estoy para justificar a nadie, ni para poner pretextos, pero me parece que eso está pasando en algunos jugadores, no es que no quieran, porque me demuestran otra cosa toda la semana. No pueden y hay que encontrar el porqué. Encontrarlo, ayudarlos, entrenarlo y adelante. Es una derrota dura, no había perdido en casa en Liga, otra vez casi nos vamos sin gol, que le duele recibir y más no hacer goles. Duele mucho”, enfatizó.
Agregó que vienen rivales complicados, como Xolos el miércoles, y América el sábado, y no pueden volver a tener una actuación como esta.
“Tenemos 15 días sin encontrar y sin hacer lo que veníamos haciendo los primeros partidos. Parece que hay algunos jugadores sin reacción, hay que encontrar qué está pasando, poner a todos en un nivel mucho mayor. Si no estamos todos bien, no podemos ganar”, precisó.
Añadió que cada vez hay menos margen de error si se quiere estar en la ‘Fiesta Grande’, por lo que será primordial regresar al estilo de juego que se tenía para no dejar ir puntos y que no se escape la liguilla.
