Cuando Paola Espinosa piensa en Ivanna, la hija que espera con Iván García, la mirada se le ilumina. En agosto próximo, la clavadista conocerá a su primogénita y su vida dará un giro de 180 grados.
“Creo que será una etapa muy bonita porque me encuentro rodeada de personas que me aman y me ayudarán en esta nueva faceta tan maravillosa”, cuenta a EL UNIVERSAL la dos veces medallista olímpica (Beijing 20008 y Londres 2012).
Con poco más de seis meses de embarazo, Paola disfruta del jugueteo que su hija realiza en su vientre. Por las noches, revela la seleccionada, Ivanna se desplaza inquieta de un lado a otro recordándole la aventura que está a punto de arrancar.
“Todavía tengo algunas náuseas y a veces no puedo dormir bien, pero me siento plena y feliz porque siempre quise ser madre. Cuando se mueve me da mucha ternura y tengo muchas emociones juntas; entonces le canto, le hablo con mucho amor y le digo que su papi y yo la estamos esperando”.
Hoy, Paola tendrá un Día de las Madres muy especial. “Ya me va a tocar regalo [risas] y creo que será un festejo muy especial, porque por primera vez podré compartirlo de otra forma con mi mamá, hermana y abuelita. Quizá hagamos una comida en la que yo pueda llenar de besos y abrazos a mi mamá”.
Ahora Espinosa valora más las cualidades de Josefina, su madre.
“Creo que antes no me daba cuenta de todo lo que hizo por mí, pero ella fue fundamental para convertirme en la mujer que soy ahora. De ella aprendí que siempre debo alentar a mi hija, apoyarla para que se levante de las caídas y claro, creo que voy a ser muy empalagosa como lo soy con Iván”.
—¿Qué tipo de mamá quieres ser?
—Una muy feliz, que esté al pendiente de Ivanna en todos los sentidos, que la ame y cuide como lo hizo mi mamá. Quiero ser detallista, emprendedora y con sueños en mi profesión, que mi hija se sienta orgullosa de mí.
Le restan menos de tres meses de espera: tiempo que utilizará para alistar todo para su niña.
“Iván y yo ya comenzamos a decorar su cuarto y elegimos el color. Aún falta un poco para conocerla, así que vamos paso a paso”.
Con la cuenta regresiva en marcha, Paola confiesa que la coquetería siempre ha sido parte de su personalidad y espera recuperar su figura tras el nacimiento de Ivanna.
“Es muy difícil para mí tener que usar ropa de talla mucho más grande de la que estoy acostumbrada, ha sido difícil para mí como mujer, pero sé que el cuerpo tiene memoria y recuperará su forma”.
“Ya seis meses. Más motivado que nunca para salir adelante por ustedes”
IVÁN GARCÍA, clavadista, papá de Ivanna