El 20 de junio de 1998, fue el último día que México y Bélgicase enfrentaron en un partido de futbol. El escenario fue en la Copa del Mundo de Francia 98.
El resultado de aquel juego fue un empate a dos goles; Alberto García Aspe y Cuauhtémoc Blanco marcaron por el bando tricolor, el belga Marc Wilmots convirtió un doblete.
Con ese resultado, México estaba prácticamente calificado a los octavos de final del Mundial galo; un duelo anterior el combinado nacional había derrotado 3-1 a Corea del Sur.
Lo que nadie olvida del encuentro ante los 'Diablos Rojos' fue la soberbia anotación de Blanco al minuto 62, la cual sentenciaría el empate final (2-2).
Un contragolpe comandado por Jesús Arellano, un centro de Ramón Ramírez y una excelsa pincelada del atacante mexicano significaría uno de los mejores goles del mundial francés.