Afectados por la incertidumbre, los Gallos Blancos son víctimas de lafalta de concentración, al tiempo que el aún presidente del equipo, Adolfo Ríos, pide a gritos que los aficionados asistan al estadio La Corregidora para paliar la crisis de los jugadores, quienes han sido afectados por el impago de sus salarios.
Según Ríos, lo que más ha pesado en el seno del cuadro queretano es que nadie les ha notificado lo que podría suceder, de ahí la poca concentración que exhiben en los partidos, por lo que “necesitamos una respuesta”, reclamó el dirigente.
En entrevista, señaló que espera se conozca en esta semana quién se hará cargo administrativa y operativamente del equipo, situación que involucra a las fuerzas básicas y al personal que labora en el club.
Desesperado, recurrió al llamado de su afición, para que acuda el próximo viernes a La Corregidora y se retrate en la taquilla, de cara al encuentro contra el Toluca.
“Sería una situación que nos ayudaría mucho, porque tendríamos recursos para la operación, no para pagarle a todos los jugadores, pero sí un porcentaje”, explicó.
Justificó las distracciones en la plantilla que dirige Ignacio Ambriz y a manera de mensaje les dijo que la crisis es pasajera y pronto llegará la calma en el feudo gallo.
Manos atadas
Sin conocer a detalle de los problemas administrativos que afectan a Gallos Blancos, los jugadores buscan dar la mejor cara a su situación económica y enfocarse en lo deportivo, dijo por su parte Christian Hobbit Bermúdez.
“Es difícil, lo administrativo tratamos que nos afecte lo menos posible, si me preguntan si hay preocupación, debe haber, porque hay familias qué mantener, eso no lo puedes dejar de lado”, apuntó.
“En lo deportivo, lo que nos tiene que ocupar más es que no estamos teniendo buenos resultados. La única forma es estar unidos, los únicos que podemos sacar esto adelante somos nosotros; más claro no puede estar”.
El mexiquense añadió que la situación de los sueldos sigue siendo la misma, a pesar de que existió un acercamiento por parte de la Comisión del Jugador, pues mientras a algunos se les debe cerca de dos meses de sueldo, a otros se les llega a adeudar casi dos meses y medio.
Cegar, en aparente calma
A pesar de las investigaciones por supuestos delitos que encara la empresa de la que el Querétaro Futbol Club forma parte, ayer las actividades del Centro Gallo de Alto Rendimiento, sede del equipo, se realizaron con normalidad.
Hace algunos días, la empresa Oceanografía, encabezada por el empresario Amado Yáñez, fue asegurada por el Sistema de Administración y Enajenación de Bienes de la Secretaría de Hacienda, lo que este fin de semana se extendió a la filial que administra al equipo, llamada AJL Futbol del Golfo.
Desde que los problemas Yáñez Osuna y sus empresas salieran a la luz han circulado versiones sobre un eventual aseguramiento de las oficina del club, a pesar de que las instalaciones son propiedad del gobierno estatal, pues están dentro de la unidad deportiva José María Truchuelo.