Eliminar al América y llegar a las semifinales significa para Pumas hacer algo que nunca ha logrado en la historia de las Liguillas ante su acérrimo rival. En todos los enfrentamientos de fase final entre ambos, los felinos jamás le han recetado una derrota a las Águilas en el Estadio Azteca.
Luce como una misión dura la remontada auriazul, porque a las estadísticas en la Fiesta Grande se le suma que desde hace siete años Universidad no le ha hecho dos goles o más a los emplumados en su Nido (Clausura 2006, por 1-3) para llevarse la victoria.
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Consciente de la desventaja, el timonel felino, Antonio Torres Servín, promete que su equipo va a dejar la vida en la cancha para eliminar a los americanistas, por difícil que parezca la circunstancia.
“Al final del partido [en Ciudad Universitaria] buscamos el empate, pero faltan 90 minutos y tenemos que ir a pelear, a buscar el resultado y morirnos en la raya”, augura el timonel auriazul.
Serio, aunque un poco incómodo por saber a los suyos contra la pared, busca mantener la tranquilidad, luego del encuentro de ida en Ciudad Universitaria en el que su equipo cayó 1-0 ante las Águilas. Asegura que no vio mucha diferencia en el choque de ida de los cuartos de final, porque argumenta que el América aprovechó una sola llegada de gol para llevarse la ventaja en el Estadio Azteca.
“Fue un partido muy parejo, porque los dos equipos tuvieron oportunidades de gol; ellos la metieron y nosotros no, pero fue un clásico partido de Liguilla”, justifica.
Para el encuentro de vuelta de los cuartos de final del Clausura 2013, Universidad está en la obligación de hacer anotaciones. Ese rubro ha sido el “Talón de Aquiles” en el Pedregal. Pumas carece de fuerza ofensiva y de contundencia cuando logra crear opciones de convertir
—¿Hay preocupación porque tus delanteros fallan demasiado?
“No me inquieta, porque tenemos jugadores con gol y el partido del sábado [hoy] vamos a ir a crear situaciones pero más concentrados para poder definir”, dice.
Asegura que sus muchachos mostrarán la garra y el fervor necesario para avanzar en el recinto amarillo, porque ve en ellos la suficiente estabilidad como para lograr hacer los al menos dos goles que requieren para darle la vuelta a la eliminatoria.
“Este grupo de futbolistas es muy maduro y se lo van a sacudir [el descalabro en el juego de ida] buscando olvidarnos de esto y pensando ya en el sábado”, describe Torres Servín.
El técnico de Pumas apela a hacer historia mediante otro argumento: la casta, la dignidad de un equipo que suele dar sorpresas en Liguilla.
“Tengo confianza, fe en que lo podemos remontar, vamos a pelear hasta lo último. En el futbol todo puede pasar y más en estos partidos, tenemos orgullo, carácter y vamos a ir a pelear el pase a las semifinales”, augura seguro de poder hacer historia en la cancha del Estadio Azteca.