GUADALAJARA.— Ese suave contacto de las manos al entrar al agua todavía produce sonrisas en la doble medallista olímpica, Paola Espinosa. Por eso, la mexicana se plantea la meta de estar en Río de Janeiro 2016. El retiro es algo lejano.

Espinosa se encuentra en una zona de escasos recursos, en Tlaquepaque, Jalisco, donde firma un acuerdo de alianza entre su fundación y la organización Children International. Desde este lugar, revela que todavía no se ha recuperado de una lesión que pone en riesgo su presencia en el selectivo rumbo a los Juegos Centroamericanos de Veracruz 2014. Pero deja claro que para decir adiós al deporte, aún no hay fecha definitiva.

“Mira, yo no sé. La vida da muchas vueltas. Lo único que te puedo decir es que ahorita con lo que estoy haciendo, cada día me siento con más ganas de estar en lo que hago. Me encanta hacer este deporte, cuando no lo hago, lo extraño. Entonces, sería muy apresurado el decirte que hasta un determinado momento ya no voy a hacer clavados porque no lo sé”, explica.

“Yo voy a seguir hasta que mi mente me diga que no puede o mi cuerpo, pero créeme que ahorita me siento mucho mejor y por lo menos en mi caso, cuando ya he conseguido lo que he querido, he sido doble mendallista olímpica, campeona mundial, campeona centroamericana, panamericana, he ganado en todos lados, la verdad que el camino lo disfruto más. Entonces, sería muy apresurado decirte una fecha”, sentencia la atleta de 28 años de edad.

Google News

TEMAS RELACIONADOS