Los Gallos Blancos derrotaron a los Pumas (2-1) en un partido dramático hasta el último minuto. No ganaban en el estadio La Corregidora desde el 21 de enero de 2012, cuando se impusieron al Atlas por el mismo marcador.
Amaury Escoto volvió a anotar por el Querétaro y Gonzalo Pineda dio el triunfo a los locales, mientras que Javier Cortés descontó para los felinos.
El juego comenzó con unos Gallos Blancos visiblemente desmotivados debido a que, con el cambio de la Ley Migratoria en México, los jugadores extranjeros no podrían ver acción.
Wilberto Cosme y Omar Vásquez (colombianos), además de Juan Carlos Mariño (peruano), fueron los perjudicados y tuvieron que conformarse con ver el partido desde la tribuna.
Durante los primeros minutos, ambas escuadras trataron de mantener el dominio de la pelota, sin tener alguna opción clara de gol. Poco a poco, Pumas intentaba hilar pases para llegar a la meta de los Gallos. La jugada más clara fue un centro de Luis García hacia Eduardo Herrera, pero el chico no consiguió la anotación.
Al 35’, Efraín Velarde cometió una falta sobre Diego de la Torre y recibió la amonestación. Tras la jugada, el defensa central Marco Antonio Palacios fue a reclamarle al árbitro Fernando Guerrero, quien no aguantó y le mostró la segunda tarjeta amarilla. El Pikolín I se fue temprano a las regaderas.
La primera amarilla que vio fue por una falta sobre el portero queretano Sergio García, cuando éste ya tenía la pelota en sus manos.
Tras la expulsión, los Pumas se descompusieron y los Gallos Blancos intentaron aprovechar las opciones, pero no fueron capitalizadas y se fueron al descanso sin hacerse daño.
A los siete minutos del complemento, los auriazules tomaron la ventaja con un gol de Javier Cortés, luego de que el juvenil cobrara un tiro libre al poste izquierdo del portero García.
Los queretanos se desconsolaron tras el festejo universitario por el tanto. Clavaron las miradas en el césped; a pesar de tener ventaja numérica en la cancha, perdían.
Afortunadamente para ellos, tomaron la ventaja en sólo dos minutos.
Primero fue Escoto, quien cerró la pinza tras un disparo de Pineda. El canterano se barrió y logró la igualada. Cuando todavía se celebraba en las tribunas de La Corregidora, El Gonzo disparó desde la media luna, tras un tiro libre rebotado en la barrera. Efraín Velarde desvió el balón y Alejandro Palacios no pudo evitar la segunda anotación.
Tras el gol, los universitarios parecían espectadores del partido. Los Gallos Blancos tocaban la pelota, mientras que los felinos observaban y corrían detrás del esférico.
Ya para terminar el partido, Luis Fuentes derribó en el área a Luis Ángel Landín y el árbitro central decretó la pena máxima. Fue el propio delantero quien cobró la falta, pero el Pikolín II hizo una gran atajada.
Error que no tuvo consecuencias graves. Los Gallos Blancos rompieron la racha de casi un año sin ganar en casa, mientras que los Pumas están por sumar 20 sin triunfar en Querétaro. Su último éxito fue el 1 de mayo de 1993.